La sostenibilidad en la construcción ya no es una aspiración, sino una realidad que está transformando los espacios urbanos en Colombia. Impulsadas por tecnologías avanzadas, las edificaciones inteligentes no solo responden a los desafíos climáticos globales, sino que también optimizan recursos, reducen costos operativos y generan valor económico y ambiental.
Según el informe de Frost & Sullivan sobre edificios inteligentes en América Latina, el 25% de las nuevas construcciones en Colombia ya son consideradas inteligentes o están en proceso de serlo. Este avance está liderado por empresas como Schneider Electric, que desarrollan soluciones innovadoras para abordar las demandas de sostenibilidad. Herramientas como la Calculadora de Descarbonización de Edificios permiten simular escenarios personalizados para alcanzar la neutralidad en emisiones de carbono, optimizando tanto el impacto ambiental como el financiero. Un caso emblemático en Boston demostró ahorros de $3.7 millones en energía y $1 millón en multas evitadas, destacando la viabilidad económica de estas estrategias.
En el ámbito de la gestión energética, soluciones como EcoStruxure Power Monitoring Expert ofrecen monitoreo en tiempo real, identificando áreas de mejora y garantizando operaciones más eficientes y seguras. “La digitalización en la gestión energética no solo reduce costos, también es un pilar clave de la sostenibilidad global”, afirma Daniela Mora, directora de Digital Energy para el Clúster Andino de Schneider Electric.
El sector hospitalario en Colombia lidera esta transición, como demuestra la Fundación Cardio Infantil, que ha reducido significativamente su consumo energético gracias a la integración de tecnologías inteligentes. Esta transformación también abarca hoteles, oficinas, comercios y viviendas, evidenciando la versatilidad y escalabilidad de estas soluciones.
Además, los edificios inteligentes permiten cumplir con normativas ambientales estrictas, como la Ley Local 97 de Nueva York, evitando sanciones y optimizando presupuestos. Esta capacidad de anticipación es clave para planificar intervenciones que sean tanto sostenibles como económicamente viables.
El futuro de la construcción en Colombia está marcado por la convergencia de tecnología, innovación y sostenibilidad. Al adoptar soluciones como la Calculadora de Descarbonización y EcoStruxure, el país no solo responde a la urgencia climática, sino que también se posiciona como líder regional en eficiencia energética, construyendo un legado de impacto positivo para las próximas generaciones.
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