Veolia es uno de los principales actores en la gestión de residuos y reciclaje en España, con cifras muy relevantes. ¿Cuál es su estrategia general para el reciclaje y la valorización de residuos? ¿Cómo se ha ido adaptando esta estrategia en los últimos años?
En Veolia, nuestra estrategia parte de una visión clara: transformar los residuos en nuevos recursos. Apostamos por una gestión integral alineada con los principios de la economía circular.
En particular, priorizamos el reciclaje mecánico, especialmente en el ámbito de los residuos plásticos, y reservamos la valorización energética para aquellos residuos que no pueden ser reciclados en línea con la jerarquía de residuos. En los últimos años, hemos reforzado esta apuesta con la modernización de nuestras instalaciones y el desarrollo de soluciones digitales como Hubgrade, que mejoran la trazabilidad y eficiencia del tratamiento de residuos.
Gracias a estos avances podemos adaptarnos a las nuevas exigencias regulatorias y contribuir activamente a la descarbonización.
La iniciativa GreenUp parece ser una hoja de ruta clave para acelerar la transformación ecológica dentro de Veolia. ¿Podrías explicarnos en qué consiste GreenUp y qué objetivos concretos persigue en materia de economía circular?
GreenUp es nuestro programa estratégico para el periodo 2024-2027 y está centrado en acelerar la transformación ecológica con soluciones asequibles y replicables que descontaminan, descarbonizan y regeneran nuestros recursos.
En economía circular, GreenUp refuerza nuestro compromiso con la producción de materiales reciclados de alta calidad que se introducen nuevamente en los procesos productivos y con la optimización de los recursos. Apostamos por las cadenas de valor de los materiales y estamos desarrollando proyectos industriales de ciclo cerrado, como el que impulsamos desde La Red con el sector de la distribución.
Este plan también contempla iniciativas de simbiosis industrial y recuperación y reciclado de residuos complejos, clave para avanzar hacia los objetivos europeos de circularidad, gestión de residuos y neutralidad climática.
La economía circular es una tendencia creciente en España y Europa. ¿Cómo integráis este concepto en vuestros procesos y servicios, especialmente en la valorización de residuos como recursos?
La actividad de Veolia se articula bajo el modelo de economía circular, trabajando conjuntamente con los distintos agentes de la cadena de valor. Priorizamos la reincorporación de materiales reciclados a los ciclos productivos, ya sea en forma de materia o de energía.
Abogamos por la neutralidad tecnológica y consideramos que solo con un mix de soluciones se podrá dar cumplimiento a los retos que se plantean, en términos de circularidad, descarbonización y gestión de residuos. Esto se traduce en inversiones en plantas de reciclado de plásticos como TorrePET y La Red, que producen granzas de PET y poliolefinas de alta calidad para ser reutilizadas en sectores como el packaging, la agricultura o la construcción, en el desarrollo de proyectos de preparación de material para el reciclado químico y en el impulso al desarrollo de proyectos de valorización energética.
Nuestro objetivo es claro: evitar el vertido, reducir la dependencia de materias primas vírgenes y crear valor a partir de los residuos, apostando por soluciones de menor huella ambiental y que cumplan con la jerarquía de residuos.
Cada vez más empresas fijan objetivos de descarbonización y ven la gestión sostenible de residuos como un pilar estratégico. ¿Qué papel juega Veolia para ayudar a las compañías a cumplir con estos retos? ¿Qué soluciones específicas ofrecéis para el reciclaje industrial?
Acompañamos a nuestros clientes industriales en su camino hacia la descarbonización a través de soluciones personalizadas de reciclaje, eficiencia energética y digitalización. Desde el suministro de materias primas recicladas hasta servicios de valorización energética o gestión de residuos peligrosos, trabajamos como socios estratégicos para lograr objetivos de sostenibilidad.
Nuestra plataforma Hubgrade permite un control avanzado de la trazabilidad, las emisiones y el rendimiento ambiental, facilitando la toma de decisiones sostenibles y eficientes en tiempo real.
En materia de residuos plásticos, Veolia ha tratado y reciclado cantidades muy significativas, especialmente a través de las plantas TorrePET y La Red by Veolia. ¿Qué características y tecnologías destacan en estas plantas y cómo contribuyen al modelo circular?
Ambas instalaciones son referentes en economía circular del plástico. TorrePET, en Torremejía (Badajoz), se ha convertido en pionera en obtener la certificación de Fin de Condición de Residuo para PET reciclado de uso alimentario. Su producto, granza de alta calidad, puede ser reintroducido con total seguridad en la industria del packaging de contacto alimentario.
La Red, en Alcalá de Guadaira (Sevilla), está especializada en el reciclaje de poliolefinas (PEAD, PEBD). Ha mejorado recientemente su capacidad de procesamiento de film en un 50%, y ha optimizado la homogeneización de la granza con la ampliación de silos. Además, lidera proyectos de economía circular de ciclo cerrado, como la transformación de residuos plásticos de embalaje en nuevas bolsas con contenido reciclado para la gran distribución.
¿Cuáles son los principales desafíos técnicos y logísticos que enfrentáis actualmente en la gestión y reciclaje de residuos plásticos en España? ¿Cómo los estáis abordando?
El principal reto es fortalecer la demanda de polímeros reciclados. Actualmente, nos enfrentamos a un mercado con baja demanda estructural, volatilidad en los precios y competencia desleal por parte de importaciones fraudulentas desde terceros países. Esta situación amenaza la viabilidad de muchas plantas en Europa, incluso en países como España, que lidera la capacidad de reciclado per cápita en la UE.
En Veolia afrontamos este reto apostando por producir materiales reciclados con los máximos estándares de calidad, que cumplen los criterios de Fin de condición de residuo, certificados por entidades acreditadas y seguros para diversas aplicaciones industriales. Para estimular la demanda de materiales reciclados es clave desarrollar políticas de compra pública verde que incentiven el uso de reciclado, como criterios obligatorios de circularidad en la contratación pública, o el reconocimiento de los plásticos reciclados como materias primas esenciales en el Pacto Industrial Limpio.
Solo con un mercado estable y regulado y un equilibrio entre oferta y demanda, el reciclaje podrá consolidarse como solución estratégica de futuro.
La producción de energía a partir de residuos es otra línea importante en la que Veolia destaca. ¿Qué importancia tiene esta área dentro de vuestra estrategia global de Sostenibilidad?
Es una pieza clave en nuestra estrategia. La valorización energética es clave para tratar residuos no reciclables de forma eficiente y sostenible, transformándolos en energía útil y evitando su vertido.
Un ejemplo es el centro integral del Maresme (Mataró), que genera 100 GWh al año, evita la emisión de más de 45.000 toneladas de CO₂ y suministra electricidad equivalente al consumo de 30.000 hogares. En Veolia, defendemos una jerarquía de residuos en la que la valorización energética juega un papel importante, pero siempre subordinado a la prevención y al reciclaje.
¿Cómo trabajáis para involucrar a otros agentes, como administraciones públicas, empresas y ciudadanos, en la construcción de un sistema más eficiente y sostenible de gestión de residuos?
En Veolia, creemos en la colaboración como palanca de transformación desarrollamos infraestructuras eficientes y sostenibles, como el Complejo Ambiental Copero en Sevilla de la empresa pública de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas de Sevilla (EMASESA), el cual operamos y donde digerimos lodos que posteriormente valorizamos mediante compostaje obteniendo más de 40.000 toneladas/año para mejora de suelos agrícolas.
Con empresas, impulsamos soluciones de ciclo cerrado, como Plastiloop, nuestra plataforma de polímeros circulares que facilita el acceso a materiales reciclados de calidad.
Y con la ciudadanía, promovemos campañas de sensibilización sobre separación, reducción y reciclaje, clave para mejorar los flujos y la calidad del residuo.
¿Podrías compartir algún proyecto o innovación reciente que ejemplifique vuestra apuesta por la transformación ecológica y la economía circular?
Uno de los más representativos es Plastiloop, nuestra plataforma global para la comercialización de polímeros circulares. A través de ella, facilitamos que las empresas accedan a granza reciclada con trazabilidad, calidad certificada y soporte técnico para su aplicación industrial. Este tipo de soluciones son esenciales para consolidar la economía circular en el sector del plástico.
Pero también lo son las condiciones del mercado: necesitamos marcos regulatorios y económicos que aseguren la viabilidad de estas iniciativas, para que puedan escalar y contribuir realmente a los objetivos climáticos europeos.
Finalmente, ¿qué perspectivas y retos ves para el futuro del reciclaje y la gestión de residuos en España, y cuál será el papel de Veolia en ese camino?
España está bien posicionada para liderar el reciclaje en Europa, pero el desafío ahora es consolidar un mercado sólido para los materiales reciclados.
Veolia está preparada para asumir un rol protagonista, ofreciendo soluciones industriales, digitales y regulatorias que permitan cerrar el círculo del residuo. Apostamos por una transformación ecológica justa y eficaz, donde el reciclaje de calidad sea la norma. El éxito depende de la colaboración entre sector público, industria y ciudadanía, y estamos comprometidos a liderar ese cambio.
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