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Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), como la anorexia nerviosa, la bulimia o el trastorno por atracón, afectan a millones de personas en todo el mundo. Sin embargo, pese a su gravedad y complejidad, siguen estando rodeados de estigmas y mitos que dificultan su detección y tratamiento adecuados.
Por una mirada real
Ita salud mental lanza la campaña “Por una mirada real” junto a René Merino (@rene_estamal), ilustrador y viñetista español con un estilo sencillo que combina lo tierno y sensible con lo ácido e irónico. Sus viñetas abordan temas de carácter social y emocional, centrándose en la salud mental, las emociones cotidianas y las experiencias personales.
A pesar de que en los últimos años se le ha dado una gran visibilidad a los TCA, aún siguen existiendo mitos que hacen que siga habiendo un gran desconocimiento alrededor a la realidad de los TCA. Esta nueva campaña busca poder explicar de manera ilustrativa cuál es la realidad que existe detrás de estos graves problemas de salud mental.
A través de 5 ilustraciones realizadas por René se muestra el mito y la realidad que persiste alrededor a los TCA en nuestra sociedad.
Desmitificando los TCA
Los Trastornos de la Conducta Alimentaria son graves trastornos mentales que afectan a la salud mental de más de 400.000 personas en nuestro país. Existen diversos tipos de TCA y, aunque una de sus características comunes es la preocupación por la imagen corporal y la comida, hay mucho más detrás del desarrollo de estos problemas.
Diferentes pacientes de Ita han querido compartir algunos de los mitos que hay alrededor de los TCA para poder explicar cuál es la realidad que hay detrás de ellos y cómo conviven las personas con este trastorno de salud mental.
Uno de los primeros mitos que encontramos es la creencia de que las personas que sufren un TCA son “niñas caprichosas y superficiales”. Nada más lejos de la realidad, ya que, como señala Gabriela Hernández, psicóloga de Ita, “los TCA son trastornos mentales complejos que están asociados a factores psicológicos como la baja autoestima, el perfeccionismo, la alexitimia. Además, pueden estar relacionados con experiencias traumáticas y presiones socioculturales”.
Uno de los síntomas de los TCA es la mala relación con la comida, esto genera una falsa creencia de que “un TCA se soluciona comiendo”.
Junto a este mito, muchos y muchas pacientes también han tenido que escuchar frases como “si tuvieras un problema serio, no te importarían estas tonterías”. Es importante no minimizar la importancia y el impacto que los TCA pueden tener en las personas que los sufren.
La comida es solo la punta del iceberg, pero detrás de ellos hay mucho más. El tratamiento de los TCA requiere un enfoque interdisciplinar que incluya intervención psicológica, apoyo nutricional y, en algunos casos, tratamiento médico, abordando aspectos físicos, psicológicos y sociales. La psicoterapia es una parte fundamental del tratamiento, ya que aborda las causas subyacentes del trastorno.
Junto a estos dos primeros mitos, muchos y muchas pacientes también han tenido que escuchar frases como “si tuvieras un problema serio, no te importarían estas tonterías”.
Es importante no minimizar la importancia y el impacto que los TCA pueden tener en las personas que los sufren. “Como hemos comentado son trastornos mentales graves que pueden tener consecuencias físicas y psicológicas severas, incluyendo un alto riesgo de mortalidad. Los TCA pueden llevar a complicaciones médicas graves y afectan significativamente la calidad de vida. De hecho, la anorexia nerviosa tiene una de las tasas de mortalidad más altas entre los trastornos mentales “, explica la profesional de Ita.
Otro de los mitos más recurrente es que “una persona con TCA está extremadamente delgada”.
No todas las personas con TCA presentan bajo peso. Existen diferentes tipos de TCA, como la bulimia nerviosa y el trastorno por atracón, donde el peso puede estar dentro de rangos normales o incluso elevados, por ejemplo, el trastorno por atracón es el TCA más común y no se asocia con bajo peso. La ortorexia, una obsesión por comer saludable, también es un TCA y puede no reflejarse en el peso corporal.
Por último, uno de los mitos que encontramos es que “los TCA son cosas de chicas”.
Aunque los TCA son más prevalentes en mujeres, también afectan a hombres y personas no binarias. “La falta de diagnóstico en hombres puede deberse a estigmas y a la percepción errónea de que estos trastornos son exclusivos del género femenino. Además, el trastorno por atracón muestra una prevalencia más equilibrada entre hombres y mujeres”, explica Gabriela Hernández.
La importancia de romper mitos y de concienciar a la sociedad
Romper con los estereotipos y falsas creencias que rodean los Trastornos de la Conducta Alimentaria no solo es un ejercicio de empatía, sino una herramienta fundamental para prevenir, detectar y tratar estos trastornos de manera efectiva. Cada mito que se desmonta abre la puerta a una comprensión más humana, profunda y real de lo que implica vivir con un TCA.
Con la campaña “Por una mirada real”, desde Ita salud mental invitan a la sociedad a mirar más allá de lo evidente, a escuchar sin juzgar y a reconocer que los TCA no tienen una única cara, ni una única historia.
Consulta más información responsable en las publicaciones Corresponsables y en el Caso Práctico de Clariane en el Anuario Corresponsables 2025.
