La Asociación Española de Fundaciones (AEF) y Villafañe han presentado esta mañana la segunda edición del informe La reputación de las fundaciones corporativas. El estudio, pionero en el sector fundacional, aporta nuevas perspectivas a cuestiones surgidas en el pasado informe y profundiza en los valores de transparencia, gobernanza, impacto, visibilidad e innovación como atributos clave de para construir la fundación corporativa ideal.
El acto de presentación tuvo lugar en el Espacio Fundación Telefónica de Madrid, donde se presentaron los principales hallazgos del estudio y se destacó que, a pesar del bajo grado de conocimiento que tiene el conjunto de la sociedad sobre la función y la labor de las fundaciones corporativas, un 69,2% de ciudadanos considera que son útiles y necesarias. Aunque con márgenes de mejora, ya que un 47,2% de los encuestados señaló que las fundaciones corporativas deberían tener un mayor grado de transparencia, sobre todo en la gestión de sus finanzas, hacer más visible el impacto de su labor y desvincularse de los intereses comerciales de las empresas con las que comparten nombre.
Excelencia en la gestión reputacional en el ámbito fundacional
Durante el evento de presentación también se hizo referencia a otros datos destacables en esta segunda edición, como es la diferente valoración reputacional que tienen las fundaciones corporativas entre expertos sectoriales, donde las notas superan los 7 puntos sobre 10, frente a la población general, donde solo logran un aprobado (5,56 puntos de media). La falta de conocimiento entre la población general explica esta baja valoración y se suma a otros factores destacados como que un tercio de la población no sepa indicar cuál es la función de estas entidades, y una de cada cuatro personas piense que sirven para que las empresas desgraven impuestos. El estudio también señaló buenas prácticas de fundaciones corporativas que pueden ayudar a otras instituciones a mejorar su reconocimiento.
En el acto participaron los principales responsables de las organizaciones y fundaciones que han apoyado la realización del estudio: Pilar García Ceballos-Zúñiga, presidenta de la AEF; Isabel Salazar, directora general de Fundación Telefónica; María Malaxechevarría, directora general de la Fundación Endesa; Georgina Flamme, directora de la Fundación Abertis; Fernando Riaño, director de Relaciones Institucionales y Sostenibilidad del Grupo Social ONCE, y Ángel Alloza, CEO de Corporate Excellence. Por parte de Villafañe intervinieron Sebastián Cebrián, director general de la firma y director de Gestión y Análisis de la Reputación en Roman, además de Lissette Horta, directora de Consultoría en Villafañe, y Thays Roque, consultora de Villafañe.
A lo largo de la presentación se fueron abordando diferentes facetas que impactan en la reputación de las fundaciones corporativas. De tal manera, la presidenta de la AEF hizo referencia a la guía corporativa elaborada por la asociación donde se recalca, al igual que en el estudio, que las fundaciones «deben cumplir con los principios de transparencia institucional, alinear su misión con su estructura y su actividad, tener gobernanza sólida y ser íntegras en la gestión económica”. En su intervención, Lissette Horta destacó que, según los resultados del informe, una fundación que quiera trabajar su reputación «debe tener un propósito focalizado, no dispersarse en demasiados ámbitos”. Por su parte, Ángel Alloza recordó que la reputación «tiene que ver mucho con las expectativas de tus stakeholders, qué haces para cumplirlas, y también comunicarlo”. En esa misma línea María Malaxechevarría que uno de los grandes retos del sector es “dar a conocer a la sociedad lo que hacemos las fundaciones, tenemos que trabajar más el cómo comunicamos nuestra labor”. Y Sebastián Cebrián recalcó que las fundaciones corporativas «no hacen las cosas para contarlas, pero hacen muy buen trabajo y es preciso contarlo”.
En referencia a los datos del informe, Georgina Flamme comentó que la importancia de estudios como el presentado hoy radican en “contrastar lo que nosotros pensamos con lo que se ve desde fuera” porque “las fundaciones debemos salir de nuestra zona de confort y hacer un poco de análisis autocrítico”. Sobre la labor de las fundaciones, Fernando Riaño defendió “el papel real que juegan las fundaciones para generar cambios, también en el ámbito regulatorio” donde comentaba con un juego de palabras que “no es tanto hacer lobby, sino hacerlo bien”. La directora general de Fundación Telefónica quiso poner el acento en la innovación entendida “como la adecuación de las actividades de la fundación a las necesidades sociales” y, en su caso concreto, en cómo “a través de la tecnología tenemos la capacidad de abordar retos sociales”.
La segunda edición de este informe refleja el compromiso de Villafañe y todos los colaboradores del estudio en impulsar la excelencia en la gestión reputacional en el ámbito fundacional. Del mismo modo sienta las bases para el desarrollo de herramientas que permitan a las fundaciones corporativas autoevaluar su desempeño en los distintos valores y variables reputacionales detectados, y así determinar las áreas de mejora prioritarias para cada una.
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