¿Cuál fue el principal motor que llevó a vuestra empresa a convertirse en una B Corp y qué beneficios tiene formar parte de esta comunidad de empresas con propósito?
Desde que nacimos, en Nazaríes Intelligenia tenemos claro que nuestro propósito va más allá del desarrollo tecnológico: queremos generar un impacto real y positivo en la sociedad y el entorno. Esta convicción forma parte de nuestra cultura corporativa desde el primer día, y convertirnos en una empresa B Corp fue una evolución natural para dar forma, estructura y medición a ese compromiso.
Ser la primera empresa tecnológica en Andalucía y una de las cinco en España en lograr esta certificación ha sido un hito que reafirma nuestro camino. Formar parte de la comunidad B Corp nos permite conectar con otras empresas que comparten nuestros valores, aprender de ellas y colaborar en iniciativas que contribuyen activamente a construir un futuro más justo, sostenible y humano.
En el camino hacia la sostenibilidad, ¿cuáles han sido los desafíos, ya sea internos o externos, más complejos que habéis enfrentado? ¿Podríais compartir algún caso concreto y cómo lograsteis superarlo?
En nuestro camino hacia la sostenibilidad, uno de los retos más complejos que hemos enfrentado ha sido integrar verdaderamente los principios del impacto positivo en todas las áreas de la empresa. No se trata solo de tener iniciativas puntuales, sino de conseguir que la sostenibilidad sea transversal, que esté presente en cada decisión, desde la gobernanza hasta las operaciones más cotidianas.
Un caso concreto fue la implantación de nuestra política de papel cero. Aunque a simple vista puede parecer un cambio sencillo, supuso replantear muchos procesos internos, digitalizar completamente la gestión documental y acompañar al equipo en esa transición. Fue un reto tanto operativo como cultural, pero hoy podemos decir que ha tenido un impacto ambiental positivo y ha mejorado nuestra eficiencia diaria.
También nos enfrentamos al reto de aplicar prácticas de compra responsable. Decidimos priorizar proveedores locales y éticos, lo que implicó revisar nuestras cadenas de suministro y en algunos casos tomar decisiones más exigentes desde el punto de vista económico. Sin embargo, hacerlo reforzó nuestra coherencia y nuestro compromiso con el entorno más cercano.
A nivel interno, otro de los grandes retos ha sido construir una cultura organizacional inclusiva y equitativa. Nos propusimos garantizar la igualdad salarial, fomentar la diversidad y crear un entorno donde todas las personas se sintieran escuchadas y valoradas. Para ello, implementamos encuestas bimensuales que nos ayudan a recoger feedback constante y a mejorar de forma continua en base a lo que realmente necesita nuestro equipo.
Superar estos retos nos ha permitido crecer no solo como empresa, sino también como comunidad. Sabemos que aún queda mucho por hacer, pero cada paso que damos en esta dirección fortalece nuestro propósito y nuestra forma de entender el impacto.
Si tuvierais que destacar vuestros tres grandes objetivos estratégicos para seguir evolucionando como empresa de impacto, ¿cuáles serían y qué acciones clave estáis llevando a cabo para alcanzarlos?
Si tuviera que destacar nuestros tres grandes objetivos estratégicos para seguir evolucionando como empresa de impacto, el primero sería sin duda impulsar una innovación tecnológica responsable. En Nazaríes Intelligenia creemos que la tecnología debe estar al servicio de las personas y del planeta. Por eso, cada cliente y cada nuevo proyecto que asumimos pasa por un filtro de impacto: evaluamos no solo su viabilidad técnica, sino también su alineación con nuestros valores y su potencial para generar un efecto positivo en la sociedad o el medio ambiente.
No queremos ser solo proveedores de soluciones tecnológicas, sino aliados estratégicos para un cambio real. El segundo gran objetivo es fomentar un crecimiento sostenible, que para nosotros significa crecer sin perder nuestra esencia. Queremos ampliar nuestras operaciones y llegar a más mercados, sí, pero manteniendo firmemente nuestros valores y asegurando que cada paso que damos fortalezca nuestro propósito. Esto implica también cuidar de forma muy consciente nuestra cultura organizativa: promover un entorno donde las personas se sientan valoradas, escuchadas y alineadas con una visión compartida. Estamos invirtiendo en procesos internos que refuercen esa cultura y en herramientas que nos permitan escalar sin dejar de ser quienes somos.
Y el tercer objetivo es consolidar un liderazgo en sostenibilidad. Queremos ser referentes, pero desde una perspectiva colaborativa. Participamos activamente en el movimiento B Corp y en otros espacios de impacto, porque creemos que compartir lo que aprendemos, y aprender de otros, es clave para avanzar colectivamente. Para nosotros, liderar también implica visibilizar buenas prácticas, ser transparentes con nuestros retos y comprometernos públicamente con la mejora continua.
Estos tres ejes: innovación responsable, crecimiento con propósito y liderazgo colaborativo, están completamente conectados. Son el reflejo de cómo entendemos nuestro rol como empresa: no solo generar valor económico, sino también contribuir de forma tangible a un futuro más justo y sostenible.
Para una empresa que quiere comenzar el camino hacia convertirse en B Corp, ¿qué aprendizajes clave le compartiríais para evitar errores comunes y construir una estrategia de impacto sólida y auténtica?
Para cualquier empresa que esté planteándose iniciar el camino hacia ser B Corp, lo primero que recomendaría es hacerlo desde un compromiso auténtico. No se trata de una estrategia de marketing o de obtener un sello para lucir, sino de asumir con seriedad una forma distinta de entender el propósito empresarial. En nuestro caso, para Nazaries Intelligenia, convertirse en B Corp fue un paso natural, porque ese compromiso con el impacto positivo ya lo teníamos desde nuestros inicios. La certificación fue más bien una forma de medirnos, de validarnos externamente y de asegurarnos de que lo que veníamos haciendo estaba alineado con los más altos estándares de sostenibilidad, equidad y gobernanza.
Un aprendizaje importante en este proceso ha sido entender que no se trata de cambiar solo una parte de la empresa, sino de mirarla en su conjunto. La metodología B Corp te lleva a revisar todas las áreas: desde la forma en la que tomas decisiones, cómo tratas a tu equipo, cómo interactúas con tus clientes y proveedores, hasta cómo impactas al entorno social y ambiental. Esto te obliga a tener una visión mucho más holística, y eso es algo muy valioso.
Y también aprendimos a abrazar la mejora continua y la transparencia como una práctica habitual. La certificación no te pide perfección, sino compromiso y coherencia. En Nazaries Intelligenia, compartimos nuestros avances, pero también somos muy conscientes de lo que aún podemos mejorar. Esta actitud abierta y honesta es la que realmente te permite construir una estrategia de impacto sólida, duradera y creíble.
En un contexto donde muchas marcas se apropian del lenguaje de la sostenibilidad, ¿qué buenas prácticas implementáis para comunicar vuestro propósito de forma auténtica y genuina y evitar el greenwashing?
Es cierto que hoy muchas marcas han adoptado el lenguaje de la sostenibilidad, pero no siempre con la coherencia necesaria detrás. En Nazaríes Intelligenia somos muy conscientes de ese contexto y del riesgo de caer en el greenwashing, por eso desde el principio apostamos por una comunicación basada en la transparencia y la evidencia. Y esto se trata de respaldar cada mensaje con datos concretos, resultados medibles y acciones reales que reflejen nuestro compromiso.
Esa forma de comunicar no se limita al exterior. Para nosotros, es igual de importante cómo trasladamos nuestro propósito y nuestras prácticas hacia dentro de la organización. La coherencia empieza con el equipo: que todas las personas que forman parte de Nazaríes Intelligenia entiendan y compartan el por qué de lo que hacemos, y vean reflejado ese compromiso en las decisiones del día a día. La sostenibilidad no puede ser solo una fachada; tiene que vivirse desde dentro para poder proyectarse hacia fuera con credibilidad.
Además, alineamos nuestra comunicación interna y externa, con estándares reconocidos. Contamos con la certificación B Corp y la ISO 14001, que validan tanto nuestras prácticas ambientales como nuestra gestión global del impacto. Estas certificaciones no solo nos exigen rigor y mejora continua, sino que nos ayudan a comunicar con solidez y responsabilidad, evitando afirmaciones vacías o poco verificables.
En definitiva, creemos que la autenticidad no se construye con grandes discursos, sino con coherencia, evidencia y una cultura compartida. Solo así es posible comunicar un propósito real, que inspire dentro y genere confianza fuera.
¿Cómo os estáis preparando para superar con éxito los nuevos estándares del movimiento B Corp, que se publicarán este 2025?
Fuimos el host de la presentación oficial a medios de los nuevos estándares B Corp en nuestras oficinas, en un evento organizado por B Lab. No fue solo un gesto simbólico, sino una forma de expresar nuestro compromiso real con el movimiento y con los valores que representa.
Los nuevos estándares ya han sido publicados, y para Nazaríes Intelligenia suponen no solo una evolución natural del sistema, sino también una reafirmación del tipo de empresa que queremos ser. Asumimos este nuevo marco como una oportunidad para seguir creciendo con propósito, coherencia y responsabilidad.
Ya estamos trabajando en la adaptación a esta nueva etapa, integrando los nuevos requisitos en nuestras prácticas diarias como parte de nuestro compromiso continuo con la mejora y el impacto positivo.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: B Corp – Empresas con Propósito