Carmen Lara, Responsable de Comunicación Corporativa y Sostenibilidad en Bayer, comparte su visión sobre la evolución de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y la sostenibilidad a lo largo de su carrera, fuertemente vinculada al sector farmacéutico. “He tenido la suerte de trabajar en grandes compañías con un fuerte compromiso en sus entornos, lo que me ha permitido vivir de cerca cómo la sostenibilidad ha ganado peso estratégico y se ha integrado de forma natural en el enfoque ESG”, afirma con orgullo.
Desde Bayer, destaca el papel fundamental que juegan los equipos distribuidos por todo el país, que dan vida a sus programas de voluntariado: “Nuestros voluntarios de Bayer han sido la voz y las manos que nos han permitido atender situaciones de vulnerabilidad de forma cercana y flexible”. Además, resalta un reciente avance: la posibilidad de que cada empleado pueda dedicar una jornada laboral a la acción social. “Con ello, esperamos seguir sumando acción para un mundo mejor”.
En el marco del 20 aniversario de Corresponsables, Carmen subraya su papel como un referente clave en la visibilización y el posicionamiento estratégico de la acción social: “Corresponsables ha sido durante todos estos años una referencia en este sentido y ha jugado un rol clave para dar visibilidad a iniciativas que muestran el verdadero compromiso de las organizaciones”. Además, reconoce la importancia de esta visibilidad para sensibilizar y movilizar: “La visibilización de la acción social es una muestra de compromiso en sí misma y una forma de sensibilizar sobre un tema tan relevante para todos”.
Mirando hacia el futuro, pone en valor el rol de las nuevas generaciones en la continuidad del compromiso empresarial con la sostenibilidad: “No solo deben continuar este legado, sino también reinventarlo, enriquecerlo y liderar activamente su transformación. Su energía, su visión crítica y su sentido del propósito son esenciales para construir un futuro más justo y sostenible”.
Carmen, ¿cuándo y por qué comenzaste a interesarte e involucrarte en el ámbito de la Responsabilidad Social y Sostenibilidad?
Mi involucramiento profesional con la Sostenibilidad está estrechamente ligado a mi trayectoria en la industria farmacéutica, un sector en el que he tenido la fortuna de desarrollarme profesionalmente y de formar parte de grandes compañías con un fuerte compromiso con el entorno social, económico y ambiental en el que operan.
Desde el inicio, he podido comprobar cómo estos compromisos no eran meramente formales, sino que se traducían en acciones reales y sostenidas, alineadas con los valores corporativos y con una visión de largo plazo.
“Mi involucración con la sostenibilidad comenzó en la industria farmacéutica”
A lo largo de los años, me he sentido profundamente orgullosa de haber sido testigo, y también partícipe, de la gran evolución de esta área, que ha pasado de ocupar un rol secundario a consolidarse como un pilar estratégico dentro de las organizaciones. Esta transformación ha sido progresiva pero firme, y hoy en día vemos cómo la sostenibilidad se integra de forma natural y transversal en los planes de negocio, especialmente a través del enfoque ESG (Environmental, Social & Governance), donde la Responsabilidad Social cobra cada vez más protagonismo como parte de un modelo corporativo responsable y orientado al impacto positivo.
¿Cuándo conociste a Corresponsables? ¿Qué papel consideras que ha tenido en el impulso de la RSE en las últimas dos décadas?
Conocí a Corresponsables hace ya varios años, en un momento en que comenzaba a tomar mayor conciencia del poder que tiene la comunicación responsable como palanca de transformación social y como herramienta para dar visibilidad a iniciativas que, de otro modo, podrían pasar desapercibidas. Desde entonces, he seguido de cerca su trayectoria y evolución, y no me cabe duda de que su contribución al ecosistema de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) ha sido y sigue siendo muy valiosa.
“Corresponsables ha sido una referencia durante todos estos años”
Considero que la visibilización de la acción social es un factor clave para su avance, ya que no solo representa una muestra tangible de compromiso, sino que también se convierte en un potente vehículo para sensibilizar y generar conciencia en torno a temas que son relevantes para todos, tanto a nivel empresarial como ciudadano.
En este sentido, Corresponsables ha desempeñado durante todos estos años un papel fundamental como referente en la difusión de buenas prácticas, actuando como altavoz de las organizaciones comprometidas y contribuyendo de forma decisiva al posicionamiento estratégico de la acción social dentro del tejido empresarial.
¿Cuáles consideras que han sido los hitos más importantes en la evolución de la RSE y la Sostenibilidad en estas dos décadas y qué factores crees que han impulsado estos cambios?
Desde mi experiencia, he podido observar cómo, en las últimas dos décadas, la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y la Sostenibilidad han dejado de ser iniciativas aisladas o filantrópicas para convertirse en ejes estratégicos que forman parte del núcleo de la gestión corporativa. Este cambio ha sido impulsado por múltiples factores, entre ellos el aumento de la conciencia social, el rol activo de los consumidores y la presión creciente por parte de inversores, reguladores y otros grupos de interés que exigen mayor transparencia, ética y compromiso con el entorno.
“La Sostenibilidad se ha vuelto un compromiso estratégico en las organizaciones”
En este contexto, desde Bayer mantenemos una sólida trayectoria en materia de acción social, y sin duda uno de los pilares fundamentales de este recorrido han sido nuestros equipos locales, distribuidos en los distintos centros que tenemos en el país. Estos equipos dan vida a lo que llamamos nuestros voluntarios Bayer, quienes han sido, literalmente, la voz y las manos de la compañía en el territorio, permitiéndonos actuar con rapidez y empatía frente a situaciones de vulnerabilidad en nuestros entornos más cercanos.
Uno de los aspectos más valiosos de este modelo ha sido su estructura flexible, que nos ha permitido mantenernos cercanos a las necesidades reales y cambiantes de las comunidades, respondiendo con agilidad y compromiso.
Además, este año hemos dado un paso más activando un programa que permite a todas las personas que trabajan en Bayer destinar una jornada laboral a actividades de acción social. Con esta iniciativa, buscamos no solo aumentar el alcance de nuestras acciones, sino también fomentar una cultura interna de solidaridad, propósito y compromiso colectivo, convencidos de que cada contribución suma en la construcción de un mundo mejor.
Querida Carmen, ¿qué lecciones has aprendido a lo largo de tu carrera en RSE?
A lo largo de mi trayectoria en el ámbito de la Responsabilidad Social Empresarial, he aprendido numerosas lecciones valiosas, pero hay algunas que destacan especialmente y que me acompañan en cada paso profesional.
“Promover entornos más justos, diversos e inclusivos no solo es un imperativo ético, sino también una condición indispensable para construir un futuro sostenible”
Una de ellas es, sin duda, el valor de las conexiones humanas: la capacidad de generar vínculos significativos, auténticos y basados en la confianza es fundamental para que las iniciativas sociales prosperen. Las alianzas, tanto internas como externas, multiplican el impacto y permiten abordar los retos sociales desde una perspectiva colaborativa y transformadora.
Otra gran lección es la riqueza que aporta la diversidad, la equidad y la integración. No podemos aspirar a un desarrollo sostenible si dejamos a personas o colectivos atrás. Por eso, estoy convencida de que no es posible avanzar como sociedad si no aseguramos el progreso de todos aquellos que la integran. Promover entornos más justos, diversos e inclusivos no solo es un imperativo ético, sino también una condición indispensable para construir un futuro sostenible.
Para finalizar, ¿qué papel crees que deben jugar las nuevas generaciones en la continuación de este legado?
Las nuevas generaciones tienen un papel absolutamente crucial en la continuidad y evolución del legado en materia de sostenibilidad y responsabilidad social. Son una generación mucho más consciente, exigente y comprometida con el impacto de sus acciones, tanto a nivel individual como colectivo, y eso representa una enorme oportunidad para seguir impulsando el cambio.
Desde Bayer, creemos firmemente que el futuro se construye desde la colaboración intergeneracional: los aprendizajes acumulados deben coexistir con las nuevas miradas, más frescas, creativas y valientes. Las nuevas generaciones no solo deben continuar este legado, sino también reinventarlo y enriquecerlo, aportando nuevas formas de pensar y de actuar, más alineadas con los retos sociales, ambientales y económicos que enfrentamos como sociedad global.
“No podemos avanzar si no aseguramos el progreso de todos”
Además, estamos convencidos de que su papel no debe limitarse a ser receptores de este legado, sino líderes activos en su transformación. Por eso trabajamos desde la compañía para ofrecerles espacios donde puedan desarrollarse, participar y proponer, integrándolos en nuestras iniciativas de sostenibilidad, voluntariado y acción social.
El futuro de la RSE y la sostenibilidad necesita de su energía, su visión crítica y su profundo sentido del propósito, y nosotros tenemos la responsabilidad de facilitarles ese camino y aprender también de ellos.
Accede a más información responsable en nuestra biblioteca digital de publicaciones Corresponsables y en el Caso Práctico de Bayer en el Anuario Corresponsables 2025.