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El Informe Voluntare 2025, presentado con motivo del Día Internacional del Voluntariado, revela cómo el voluntariado corporativo ha evolucionado en los últimos años, consolidándose como una herramienta estratégica clave no solo para la gestión interna de las empresas, sino también para su impacto social y reputación corporativa. Con la participación de 236 organizaciones de Europa y Latinoamérica, el informe subraya que el voluntariado corporativo se ha transformado de una acción aislada en un pilar estructural de la estrategia social y de gestión del talento de las compañías.
Voluntariado Corporativo: De Gesto Altruista a Herramienta Estratégica
El voluntariado corporativo ha madurado significativamente en la última década. Según el informe, en la actualidad el 97% de las empresas ofrecen actividades de voluntariado durante la jornada laboral, frente al 82% en 2015, lo que refleja un cambio profundo en la concepción de estas iniciativas dentro de las organizaciones. Este cambio ha ido más allá de la mera acción altruista, convirtiéndose en un vehículo de transformación cultural y social dentro de las empresas.
Benedetta Falletti, directora de Voluntare, afirma que “el voluntariado corporativo ha pasado de ser un gesto altruista a convertirse en una herramienta estratégica que genera valor compartido: para la empresa, para las personas y para la sociedad”. Este fenómeno, impulsado por el reconocimiento de los beneficios mutuos del voluntariado para las empresas y la sociedad, ha permitido que más del 93% de las organizaciones confíen en que sus programas de voluntariado seguirán creciendo en los próximos años.
Participación Creciente y Alineación con la Estrategia Corporativa
El informe también revela que la participación de los empleados en el voluntariado corporativo ha experimentado un crecimiento impresionante. En los últimos cinco años, el 77% de las organizaciones moviliza a más del 10% de su plantilla, y el 45% supera el 20%. Este aumento en la participación refleja cómo el voluntariado ha dejado de ser una actividad esporádica para convertirse en una parte integral de la cultura organizacional.
El voluntariado corporativo no solo ha ganado en participación, sino que también se ha alineado con las estrategias corporativas de las empresas. El 99,2% de las organizaciones aseguran que el voluntariado está alineado con los valores corporativos, mientras que el 99,6% lo vincula directamente con las necesidades de la comunidad. Además, las actividades realizadas están estrechamente relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente con el ODS 4 (Educación de Calidad) y el ODS 10 (Reducción de las Desigualdades).
Este alineamiento estratégico se refleja también en la alta motivación ética y social de las empresas, con un 98,7% promoviendo el voluntariado por responsabilidad social. El 94,1% también lo orienta a la gestión del talento, utilizando el voluntariado como una herramienta para atraer y retener talento, fortaleciendo el orgullo de pertenencia y la motivación de los empleados.
Voluntariado Basado en Habilidades: Conectar Competencias Profesionales con Causas Sociales
Una de las tendencias más destacadas que está ganando fuerza es el voluntariado basado en habilidades. Cada vez más empresas están utilizando las competencias profesionales de sus empleados como parte de sus programas de voluntariado, conectando así sus conocimientos y habilidades con causas sociales. Este enfoque no solo aumenta el impacto social, sino que también permite a los empleados desarrollar competencias adicionales y adquirir habilidades de liderazgo que pueden ser utilizadas dentro de la propia organización.
Por ejemplo, Fundación Telefónica está explorando cómo la tecnología puede potenciar el voluntariado, creando oportunidades inclusivas para reducir las brechas digitales y acercar carreras STEM a mujeres, fomentando un diseño inclusivo y ético de la tecnología. Además, el uso de la tecnología también ha impulsado el voluntariado virtual, una modalidad que se ha consolidado tras la pandemia y que sigue ganando popularidad.
La Cultura de Alianzas y el Voluntariado Social
El informe también destaca cómo la cultura de alianzas se está consolidando como un componente esencial de los programas de voluntariado. La colaboración con entidades sociales, comunidades locales y otras empresas es cada vez más común, ya que permite generar un impacto más profundo y sistémico en la comunidad. Estas alianzas no solo ayudan a mejorar el impacto social, sino que también crean un entorno de trabajo más colaborativo y solidario, en el que las empresas, los empleados y las comunidades se benefician mutuamente.
Retos y Oportunidades para el Voluntariado Corporativo
Aunque el voluntariado corporativo ha experimentado un crecimiento significativo, aún existen varios retos que enfrentan las empresas. En Europa, uno de los principales desafíos es movilizar a más voluntarios y reforzar la innovación dentro de los programas. Además, las empresas deben seguir aumentando el compromiso de la alta dirección para garantizar que el voluntariado se mantenga como una prioridad estratégica.
Por otro lado, en Latinoamérica, el foco está en profesionalizar la gestión del voluntariado y en ampliar los recursos destinados a estos programas. A pesar de estos retos, ambas regiones coinciden en priorizar la tecnología, la formación de gestores y la medición del impacto social y ambiental.
El Voluntariado en Tiempos de Crisis
El informe también analiza cómo el voluntariado corporativo ha respondido ante situaciones de crisis y emergencias. Las empresas han demostrado una gran capacidad de respuesta, movilizando recursos rápidamente y estableciendo planes de emergencia para facilitar la intervención en momentos de necesidad. El voluntariado en remoto ha sido clave en estos momentos, permitiendo que las organizaciones mantengan su compromiso social incluso durante las restricciones impuestas por la pandemia.
El Futuro del Voluntariado Corporativo
De cara al futuro, se espera que el voluntariado corporativo continúe creciendo y evolucionando, con un fuerte enfoque en la profesionalización de la gestión, la mejora en la medición del impacto y el aumento de los recursos dedicados. El informe también señala que el Año Internacional de los Voluntarios 2026 será una oportunidad clave para impulsar aún más la integración del voluntariado en la cultura corporativa y fomentar su papel transformador en la sociedad.
Conclusión
El Informe Voluntare 2025 subraya cómo el voluntariado corporativo ha pasado de ser una acción aislada a convertirse en una herramienta estratégica que no solo beneficia a las empresas, sino también a la sociedad en su conjunto. Con un futuro prometedor, los programas de voluntariado seguirán siendo un componente esencial para la gestión del talento, la responsabilidad social y la competitividad empresarial. La colaboración entre empresas, empleados y comunidades locales seguirá siendo clave para crear un impacto duradero y transformador en la sociedad.
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