Cada hoja de papel que se imprime tiene una historia que comienza con la tala de un árbol. Y en un mundo que pierde más de 15 mil millones de árboles cada año, esa historia tiene un alto costo ambiental. En Latinoamérica, por ejemplo, una oficina promedio usa alrededor de 10 mil hojas por empleado cada año, según datos de Gartner. La mayor parte de ese papel se utiliza en trámites administrativos que podrían digitalizarse con facilidad. Ante este panorama, y en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, surge una pregunta urgente: ¿qué pueden hacer las empresas para operar de forma más sostenible y eficiente?
La respuesta es clara: transformar digitalmente sus procesos. Para Defontana, empresa especializada en soluciones de gestión empresarial, la digitalización no solo es una herramienta tecnológica, sino una oportunidad concreta de desarrollo sostenible. Implementar sistemas de gestión en la nube permite a las organizaciones reducir su huella ambiental y, al mismo tiempo, mejorar su competitividad.
“El cambio climático exige acciones reales. Migrar a plataformas digitales no solo reduce costos y mejora la eficiencia, también es una decisión alineada con la sostenibilidad global”, afirma Jimmy Quispe, Product Manager del software de Gestión de Personas de Defontana.
Desde esta perspectiva, Defontana comparte cinco beneficios clave que hacen de la digitalización una apuesta responsable para las empresas que buscan crecer sin dejar de cuidar el planeta:
1. Menos papel, más árboles
Digitalizar documentos, contratos y procesos contables disminuye significativamente el uso de papel, reduciendo así la tala de árboles y la generación de residuos sólidos. Cada documento electrónico representa una hoja menos que termina en un basural.
2. Logística más limpia
La digitalización evita el traslado físico de carpetas y documentos entre oficinas. Esto implica menos uso de transporte, menor consumo de combustibles fósiles y, por tanto, una reducción directa de las emisiones de CO₂. De hecho, el transporte es responsable de casi el 25% de los gases de efecto invernadero a nivel global.
3. Espacios más eficientes
Con menos papeles y archivos físicos, las empresas pueden optimizar sus espacios de trabajo. Esto no solo mejora la experiencia de los colaboradores, sino que también reduce el consumo energético asociado al mantenimiento de zonas de almacenamiento.
4. Energía optimizada
Al operar con plataformas 100% en la nube, como las que ofrece Defontana, se eliminan servidores internos y se reduce el uso de equipos que deben mantenerse encendidos. Esto permite un consumo eléctrico más bajo y una infraestructura más ágil y sostenible.
5. Control ambiental en tiempo real
La digitalización permite un seguimiento detallado de los procesos y del uso de recursos. Con información precisa y actualizada, las empresas pueden medir su impacto ambiental, detectar excesos o ineficiencias y tomar decisiones más responsables.
Digitalizar no es solo innovar: es asumir un compromiso con el desarrollo
Además de los beneficios operativos, la digitalización representa un paso firme hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Específicamente, está alineada con el ODS 12, que promueve un consumo responsable, y el ODS 13, que llama a la acción climática. En otras palabras, las herramientas digitales no son solo soluciones empresariales, sino también vehículos para el cambio ambiental y social.
Jimmy Quispe lo resume con claridad:
“Más que una tendencia, la digitalización es una responsabilidad empresarial y una oportunidad para impulsar un cambio real hacia la sostenibilidad. Aquellas empresas que adopten esta visión estarán mejor preparadas para los desafíos futuros y para generar un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente.”
Con soluciones ERP 100% web, Defontana apuesta por una transformación digital que no solo automatiza procesos, sino que contribuye a construir un modelo económico más limpio, resiliente y justo.
Porque hoy, más que nunca, hacer empresa también significa proteger el planeta.
