Hablar de Cruz Roja es hablar de esperanza para millones de personas. Basta con ver a diario las noticias para encontrar su presencia en medio de todos los conflictos y desastres naturales, atendiendo las necesidades de la población, materiales y emocionales, y ayudando a los más necesitados a recuperar su vida. Pero no hay que irse tan lejos. Cruz Roja está presente a nuestro lado en el día a día y muy cerca de nuestras realidades. A miles de kilómetros o en nuestro entorno más inmediato, las personas que dan vida a esta institución brindan desde ayuda humanitaria o asistencia médica a apoyo y compañía. Todo lo que un ser humano puede necesitar para sentir alivio cuando sufre y para ver la luz al final del túnel.
En este marco de celebración, cuando se cumplen 160 años desde su creación en España es más que justo destacar los logros de una institución como Cruz Roja que, desde el respeto y la imparcialidad, y actuando siempre en nombre de la paz, ha conseguido involucrarnos a todos con sus valores. Se ha ganado el respeto máximo de la sociedad y de los gobiernos, es admirada por su ingente labor de protección a los más vulnerables y por la promoción que hacen de los derechos humanos en todas partes del mundo. Además, cuenta con el apoyo incondicional de miles de personas que dedican parte de su tiempo a los demás en sus programas de voluntariado. También entre todas las entidades del tercer sector, para el que Cruz Roja ha sido pionera en la que encuentran un referente a seguir.
Como Directora de Fondos Sociales de Fundación MAPFRE es un honor para mí tener la oportunidad que me brindan las Ayudas +Rural 2023 de la Fundación, puestas en marcha en el marco del Programa de Inclusión Social, Garantía Infantil y Lucha contra la pobreza del FSE+ (el principal instrumento de Europa para invertir en personas) para trabajar a su lado, ya que Cruz Roja ha resultado beneficiario de estas ayudas. Su proyecto Vincúlate, que desarrollarán hasta finales del 2025, tiene por objetivo mejorar la calidad de vida de las personas mayores en su proceso de envejecimiento y luchar contra la soledad no deseada en el ámbito rural de las comunidades autónomas de Aragón, La Rioja, Asturias, Castilla y León, Murcia, Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura.
Estoy segura de que el intercambio mutuo de conocimientos y valores va a hacer de esta una experiencia muy enriquecedora. Estamos deseando empezar a ver los frutos de su acción en estas regiones. Porque su labor se va a traducir en vidas transformadas. En Fundación MAPFRE nos gusta decir que cada oportunidad es una puerta que se abre y esta es, sin duda y de la mano con Cruz Roja, una puerta hacia un futuro mejor.
Esta tribuna forma parte del Dosier Corresponsables: Día Mundial de la Cruz Roja 2024.