En DURÁN Solidarios, entendemos que la responsabilidad social no es un accesorio de la actividad empresarial, sino un deber fundamental que refleja el legado de nuestra historia como empresa familiar. Con más de cien años de trayectoria en el ámbito de la construcción, asumimos el compromiso de llevar adelante una misión alineada con los valores humanistas que hemos recibido de generaciones anteriores. Este legado, que hoy fortalece la cuarta generación de nuestra familia, se centra en una ética de trabajo basada en el esfuerzo, el respeto y una clara vocación social.
El Día Mundial contra el trabajo infantil es una ocasión para reflexionar sobre la necesidad de crear oportunidades reales para las futuras generaciones. En alianza con la Fundación Vicente Ferrer, organización reconocida por su labor en India, hemos trabajado en proyectos de transformación sostenible, como la construcción de viviendas en Madakasira, una región donde las necesidades básicas son un desafío diario. Este proyecto no solo ofrece infraestructura segura, sino también un entorno estable que fomenta el desarrollo y la inclusión social de sus habitantes, especialmente los niños y niñas.
Para nosotros, una empresa humanista debe poner a las personas en el centro de sus acciones y trabajar para dignificar sus vidas. Nuestros padres y abuelos nos inculcaron la importancia de retribuir a la sociedad parte de lo recibido, reconociendo el papel del esfuerzo conjunto tanto de la familia como de nuestro equipo. Este compromiso con causas sociales, culturales y medioambientales nos impulsa a colaborar en iniciativas que beneficien tanto a comunidades locales como a otras regiones del mundo.
Nuestro compromiso va más allá de una colaboración económica. En DURÁN Solidarios, hemos creado un grupo de trabajo dedicado a la acción social, con la visión de integrar estos valores en el ADN de la empresa. La implicación directa de nuestro equipo humano en estos proyectos añade una dimensión humana a nuestro compromiso corporativo y permite evaluar el impacto de nuestras acciones en las comunidades. Cada año, algunos de nuestros colaboradores visitan las instalaciones de la Fundación Vicente Ferrer y ven de primera mano el impacto de nuestras contribuciones. Estas experiencias han dejado una huella profunda, transformando su visión del impacto social y fortaleciendo su sentido de pertenencia a una empresa comprometida con el bienestar de las personas.
Este enfoque humanista se refleja en nuestra implicación activa en diversas iniciativas que abarcan áreas clave como la infancia, la cultura y el medio ambiente. Nos sentimos especialmente orgullosos de nuestra colaboración con la Fundación Vicente Ferrer en India, donde desde hace años trabajamos en la construcción de viviendas en Anantapur, una región rural donde el acceso a una vivienda digna y la educación es un desafío diario. Para nosotros, no se trata solo de construir casas, sino de crear hogares seguros y estables que permitan a las familias, y especialmente a los niños, construir un futuro lleno de oportunidades.
Además de nuestro compromiso en India, también trabajamos a nivel local. Nuestro apoyo a Sonrisa Médica en Mallorca refleja nuestra creencia en el valor del bienestar emocional, especialmente para los niños hospitalizados y sus familias. También promovemos la educación y la cultura a través de nuestro programa ResSonàncies amb Talent, que ofrece formación musical a jóvenes de recursos limitados, ayudándoles a desarrollar tanto sus habilidades artísticas como competencias clave para su crecimiento personal, como la disciplina y la autoconfianza.
Nuestro enfoque también abarca la sostenibilidad medioambiental, conscientes de que un entorno saludable es indispensable para el bienestar humano. A través de nuestra colaboración con Mallorca Preservation, promovemos la conservación de los recursos naturales de la isla, asegurando su preservación para las generaciones futuras. Este compromiso medioambiental es una extensión de nuestra visión social, que reconoce el impacto de un entorno sano en el desarrollo integral de las comunidades.
En este Día Mundial contra el trabajo infantil, reafirmamos nuestro compromiso de construir una sociedad más justa y equitativa. Desde DURÁN Solidarios, agradecemos a la Fundación Vicente Ferrer por permitirnos participar en su proyecto de transformación del mundo a través de la dignificación de las personas, y especialmente de la infancia. Seguiremos trabajando junto a organizaciones que compartan nuestra visión de un futuro inclusivo, poniendo siempre a las personas en el centro de cada acción y promoviendo la dignidad de todas, sin importar su procedencia, ideología, cultura o religión.