Manel Batet Guardià, Responsable de Formación y Comunicación de RSC en Cafés Novell, acumula más de 25 años de trayectoria en una empresa que, desde sus orígenes, ha apostado por la Responsabilidad Social, la Innovación y la atención al cliente como pilares fundamentales. En esta entrevista con Corresponsables, Batet repasa su recorrido desde 1997 hasta hoy, destacando cómo la RSE ha pasado de ser una inquietud voluntaria a una necesidad estratégica para las organizaciones. “Hoy, ser responsable y sostenible es una prioridad”, afirma con convicción.
Batet recuerda también los inicios de la compra de café con certificación en origen en el año 2003, cuando aún no existía en España ninguna certificadora homologada, lo que les llevó a trabajar con la alemana UTZ Kapeh. “Años más tarde supimos que ese nombre significaba ‘buen café’ en idioma maya. Curiosamente, ese detalle reflejaba perfectamente nuestra intención”, comenta.
Sobre la evolución de la RSE, destaca que “cada día más, la Responsabilidad Social en las empresas es más transversal”, y que esta integración genera alianzas, consciencia y compromiso real. En su visión, la clave está en que “la RSE debe estar integrada en el ADN de la empresa”.
Con motivo del 20 aniversario de Corresponsables, Manel Batet no duda en poner en valor el papel de este medio como referente y guía. “Participamos con Corresponsables y su anuario desde sus inicios. Recuerdo a Corresponsables con la misma ilusión y pasión que hoy día se percibe, pero con una estructura mucho más reducida”, señala. Y añade una anécdota entrañable: “En uno de nuestros primeros encuentros, me crucé con una conocida señora de mi familia, la carismática Maria Ortiz. Le pregunté: carai Maria, què fas aquí, y resultó que formaba parte del pilar de ese reducido team de Corresponsables”.
Batet cierra con una mirada esperanzadora hacia el futuro: “Las nuevas generaciones están más concienciadas en RSE y Sostenibilidad. Saben que el cambio climático y la desigualdad están profundamente interconectados, y eso los está alineando con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”.
¿Cómo, cuándo y por qué comenzaste a interesarte e involucrarte en el ámbito de la Responsabilidad Social y Sostenibilidad?
Entré a formar parte del Grupo Cafés Novell en abril del año 1997 y recuerdo que en aquel entonces me hablaron de tres valores por los que se regía la empresa: Responsabilidad Social, Innovación y atención al Cliente. Veintisiete años más tarde el propósito y compromiso de la empresa sigue siendo exactamente el mismo, con la diferencia de que ahora hay mucha más concienciación a todos los niveles y en toda la cadena de valor, porque, hoy ser responsable y sostenible es una prioridad.
“La RSE debe estar integrada en el propio ADN de la empresa”
Una de nuestras principales preocupaciones era y sigue siendo el tema de las buenas prácticas y condiciones de los países productores de café, tanto socialmente, económicamente como medioambiental. Así fue, que como queríamos comprar el café con certificación y no podíamos porque en España no disponía de ninguna certificadora homologada para operar, en el año 2003 empezamos a operar y comprar el café verde en origen con una certificadora alemana, «UTZ KAPEH«, y donde curiosamente, años más tarde, supimos que ese nombre significaba «buen Café» en idioma Maya.
¿Cómo era el panorama de la RSE cuando comenzó en comparación con cómo es hoy?
Estamos en una situación actual con un escenario mucho más avanzado a medida que pasa el tiempo. El convencimiento de la necesidad de unas buenas prácticas y urgencia de actuación rápida está sin duda presente en todos los escalones, no obstante, en la práctica, sigue habiendo muchos intereses obstaculizadores y vacíos que lo hacen ralentizar.
“Cada día más, la Responsabilidad Social en las empresas es más transversal”
¿Cuándo conociste a Corresponsables? ¿Qué papel consideras que ha tenido en el impulso de la RSE en las últimas dos décadas?
No recuerdo cómo nos conocimos, pero participamos con Corresponsables y de su anuario desde sus inicios. Recuerdo a Corresponsables con la misma ilusión y pasión que la hoy día se percibe, pero con una estructura mucho más reducida. Como anécdota, en uno de nuestros primeros encuentros con Marcos y Ricardo recuerdo que me crucé con una conocida señora de mi familia, la carismática Maria Ortiz, y le pregunté: «carai Maria, què fas aquí«, curiosamente formaba parte del pilar de este reducido Team de Corresponsables.
“Recuerdo a Corresponsables con la misma ilusión y pasión que la hoy día se percibe”
Como medio de comunicación, está siendo ejemplo de referencia y guía para todo tipo de entidades en propósitos similares, encajando perfectamente sea cual sea su naturaleza. Aparte, es una entidad con una capacidad muy anfitriona en poder de convocatoria y creación de alianzas.
¿Qué cambios significativos has observado en esta materia desde que comenzaste?
Pienso que cada día más, la Responsabilidad Social en las empresas es más transversal y esto genera más consciencia, alianzas y compromisos desde las propias organizaciones. Esta transversalidad permite que ya no sea solo un área aislada o responsabilidad de un departamento concreto, sino que se integre en todas las áreas de la empresa: desde la gestión estratégica hasta la operativa diaria.
“Las empresas más exitosas son las que están y estarán más comprometidas con la Responsabilidad Social”
Hoy vemos cómo muchas compañías colocan la ética, el impacto social y la Sostenibilidad en el centro de sus decisiones, y eso representa un cambio profundo respecto a cómo se entendía la empresa hace unas décadas. El diálogo con los grupos de interés, la transparencia y la escucha activa también han cobrado un papel esencial en esta evolución.
¿Cuáles consideras que han sido los hitos más importantes en la evolución de la RSE y la Sostenibilidad en estas dos décadas y qué factores crees que han impulsado estos cambios?
Pienso que en la última década ha sido cuando realmente diferentes hitos han hecho que la RSE se considere una necesidad y una forma más de hacer negocio. La RSE debe estar integrada en el propio ADN de la empresa. No tiene sentido que sea un hablar, sino que toda la organización y funcionamiento de la propia empresa se vea desde el prisma de una Responsabilidad Social.
¿Qué lecciones has aprendido a lo largo de tu carrera en RSE?
Recuerdo que alguien dijo la siguiente frase: Ser CO2 para acciones puntuales es greenwashing, hay que ser en todo CO2. Me quedo con esta frase. Refleja perfectamente cómo la coherencia y el compromiso integral son fundamentales en este ámbito. A lo largo de los años, he aprendido que no basta con implementar iniciativas puntuales, sino que es imprescindible que las acciones estén alineadas con una estrategia profunda y transversal. Las lecciones más valiosas vienen de observar cómo las pequeñas decisiones del día a día pueden tener un gran impacto si se hacen con autenticidad y visión a largo plazo.
“Las nuevas generaciones están más concienciadas en RSE y Sostenibilidad”
¿Tienes alguna anécdota que refleje el espíritu y los desafíos de los primeros años de la RSE?
Creo que fue una Universidad de Ohio (USA) que hace unos pocos años ya predijo que las empresas más exitosas son las que están y estarán más comprometidas con la Responsabilidad Social. Pienso exactamente lo mismo. En aquellos primeros años, muchas veces nos encontramos con incomprensión, escepticismo e incluso con falta de recursos o estructuras que permitieran implementar acciones coherentes. Pero ese mismo desafío fue lo que dio forma a una generación de profesionales convencidos de que el cambio estructural era posible. Y esa predicción, que en su momento parecía una visión de futuro, hoy ya forma parte del presente.
¿Puedes compartir algún caso de éxito que consideres emblemático en el campo de la RSE?
Actualmente, podemos encontrar extraordinarios ejemplos de RSE de empresas grandes y de renombre, pero no podemos olvidar la pequeña y mediana empresa como imprescindible sumador de este eje de cambio. Es precisamente en este tejido empresarial donde muchas veces nacen las iniciativas más genuinas, impulsadas por la cercanía con el entorno y las personas. He sido testigo de casos en los que pequeñas empresas han logrado transformaciones profundas en sus comunidades, demostrando que la dimensión no limita el impacto. Cada actor, grande o pequeño, tiene un papel clave en el ecosistema de la Sostenibilidad.
¿Cómo ves el futuro de la RSE y la Sostenibilidad?
La RSE y la Sostenibilidad están pasando a formar parte de la propia «cuenta de explotación» (por poner una definición) de cualquier tipo de ente dentro de toda la cadena de valor. Esto significa que ya no se perciben como elementos accesorios, sino como componentes estratégicos del modelo de negocio. El futuro de la Responsabilidad Social está en su integración natural, en que forme parte del core empresarial. Las empresas que no lo entiendan así tendrán serias dificultades para adaptarse a un entorno donde las demandas sociales, regulatorias y medioambientales son cada vez más exigentes. El desafío está en mantener ese enfoque sin perder el compromiso genuino con las personas y el planeta.
¿Qué papel crees que deben jugar las nuevas generaciones en la continuación de este legado?
Las nuevas generaciones se enfrentan a un mundo lleno de desafíos, pero también repleto de oportunidades. A diferencia de generaciones anteriores, los jóvenes actuales están más concienciados en RSE y Sostenibilidad. Saben que el cambio climático, la desigualdad económica y social están profundamente interconectados y por eso, este sentimiento está creciendo y alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
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