Las ciudades concentran hoy los mayores retos y también las mayores oportunidades de la transición ecológica. En ellas se decide buena parte del futuro del planeta: más del 70% de las emisiones y hasta el 80% del consumo energético mundial se concentran en entornos urbanos. Repensar cómo crecen, se conectan y se transforman es una tarea inaplazable si queremos avanzar hacia un modelo de desarrollo más equilibrado y sostenible.
Esa aspiración conecta directamente con la meta del Objetivo de Desarrollo Sostenible 11 que busca construir ciudades y comunidades sostenibles, inclusivas y resilientes. Esto requiere ir más allá de mejorar la eficiencia de los edificios o la movilidad urbana. Se trata de redefinir el modelo de convivencia, de incorporar la naturaleza en el corazón de la planificación urbana y de concebir la sostenibilidad como un principio estructural y no como un añadido.
Esa es precisamente la visión que inspira el Proyecto Ciudad Santa Cruz de Tenerife, una iniciativa liderada por el Ayuntamiento del municipio, en colaboración con Fundación Metrópoli y fundación Moeve como aliado estratégico, que busca diseñar una ciudad del futuro capaz de responder a los retos ambientales, sociales y económicos de nuestro tiempo. Una ciudad más eficiente y competitiva, pero también más humana, capaz de ofrecer bienestar, oportunidades y calidad de vida a sus habitantes.
Desde su origen, el Proyecto Ciudad se concibe como una iniciativa colaborativa que une a instituciones, empresas, entidades sociales, expertos y vecinos para impulsar con visión a largo plazo el debate sobre las ciudades del futuro desde la sostenibilidad y la participación. Porque una ciudad inteligente no es solo aquella que incorpora tecnología y desarrolla nuevas infraestructuras, sino la que escucha, involucra y conecta a su ciudadanía en la definición de su propio destino.
En una primera fase, este proyecto participativo, que combina el rigor técnico con la escucha activa, ha desarrollado un análisis exhaustivo del territorio, que abarca desde el planeamiento y el diseño urbano hasta el sistema ambiental y la estructura productiva de la ciudad. Se ha estudiado el estado actual de Santa Cruz, sus fortalezas, sus oportunidades y sus desafíos, con el fin de identificar los componentes de excelencia que pueden impulsar su transformación.
El diagnóstico inicial ha servido de base para definir un conjunto de ideas fuerza y proyectos estratégicos que fueron contrastados en un foro ciudad: un espacio abierto donde diversos agentes locales aportaron su visión sobre el modelo de ciudad al que debe aspirar el municipio. Gracias a este trabajo, consensuamos en un segundo espacio público el documento base que marcará la hoja de ruta para hacer de Santa Cruz de Tenerife un territorio inteligente, competitivo y sostenible.
La previsión es que este documento aporte las directrices esenciales para avanzar hacia la movilidad sostenible, la integración del puerto con la ciudad, la renaturalización de los espacios urbanos, la diversificación productiva y la promoción cultural y social. Cada línea de acción se concibe como parte de una visión integral que combina sostenibilidad, inclusión y competitividad.
Porque la sostenibilidad no puede entenderse solo como un reto ambiental; también es un desafío económico y social. Requiere crear entornos que favorezcan el empleo verde, la innovación y la equidad. Y sobre todo, exige reconocer que las ciudades son comunidades vivas que evolucionan cuando se sienten parte del cambio.
Fundación Moeve: escuchar para transformar
Desde la fundación Moeve, asumimos nuestra implicación en este proyecto como una oportunidad para avanzar hacia nuestro objetivo de ser un agente de cambio en la transición ecológica. Nuestra visión, compartida con el Ayuntamiento, es convertir a Santa Cruz de Tenerife en un referente en sostenibilidad, innovación y calidad de vida, y hacerlo desde la colaboración y el consenso.
La metodología de Fundación Metrópoli ha permitido que distintos actores sociales e institucionales compartan información, conocimiento y experiencia, generando una visión común que trasciende los mandatos políticos y los intereses sectoriales. Es un ejemplo de cómo la planificación urbana puede articularse en torno a objetivos comunes y consensuados, alineados con la agenda global de desarrollo sostenible.
Santa Cruz de Tenerife se alza así como un referente emergente en cómo la innovación y la cohesión pueden avanzar de la mano, cómo la naturaleza puede integrarse en la planificación urbana y cómo la competitividad puede impulsarse sin dejar a nadie atrás. El Proyecto Ciudad aspira además a seguir creciendo e involucrando a nuevos actores de la sociedad civil y del tejido empresarial para consolidar una visión compartida de desarrollo sostenible que trascienda los límites municipales.
Desde la fundación Moeve, estamos convencidos de que las ciudades del futuro se construirán con visión compartida, participación y propósito. Por eso, seguiremos acompañando a las administraciones y a la sociedad civil en ese camino. Porque la transición ecológica es un proceso colectivo que empieza, como todo lo importante, escuchando.

 
  
 
 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 







 
  
  
 