Cada 24 de octubre, con motivo del Día Mundial contra el Cambio Climático, las reivindicaciones por actuar frente a los desafíos medioambientales son más perceptibles que nunca. En este contexto, una noticia reconfortante refuerza la necesidad de seguir trabajando: el Servicio de Monitoreo Atmosférico de Copernicus (CAMS) anunciaba que el agujero de la capa de ozono, un indicador clave del impacto humano en la atmósfera, comenzó a cerrarse en diciembre de 2024 por primera vez en cuatro años. Este hito, fruto de la cooperación internacional y el Protocolo de Montreal de 1987, es una poderosa demostración de que, cuando hay urgencia, una evidencia científica clara y voluntad política colectiva, es posible lograr cambios reales y sostenibles.
Si bien el agujero de la capa de ozono y el cambio climático son problemas diferentes, podemos aprender una lección sobre cómo la cooperación puede lograr cambios reales y sostenibles. Y nos enseña que las compañías también tenemos un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático, no solo como agentes de cambio, sino como impulsores de innovación y exploración de nuevas ideas. En el caso de Henkel, el propósito que nos guía en cada una de nuestras decisiones y acciones «Pioneers at heart for the good of generations», nos impulsa a enriquecer y mejorar la calidad de vida de las personas, siempre teniendo en cuenta nuestra aportación en la lucha del cambio climático.
Por ello, hemos establecido una hoja de ruta hacia el Cero Neto, una estrategia que va más allá de la simple compensación de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y que busca transformar nuestra cadena de valor de principio a fin. Esta hoja de ruta se fundamenta en el concepto que le da nombre «Cero Neto«, que busca equilibrar todas las emisiones de gases de efecto invernadero de origen humano, y en su clasificación en tres alcances (directas, de energía comprada e indirectas de la cadena de valor), permitiéndonos una gestión integral y rigurosa de nuestra huella de carbono.
Con esta hoja de ruta hemos establecido objetivos claros y ambiciosos que cubren una parte mucho más amplia de nuestra cadena de valor, incluyendo todas nuestras operaciones, las emisiones de la logística y el tratamiento de los productos al final de su vida útil. Nuestros objetivos pasan por reducir las emisiones absolutas de GEI de Alcance 1 y 2 en un 42% para 2030 (año base 2021), reducir las emisiones absolutas de GEI de Alcance 3 en un 30% para 2030 (año base 2021), y, para concluir, reducir las emisiones absolutas de GEI de Alcance 1, 2 y 3 en un 90% para 2045 (año base 2021).
En Henkel Ibérica, estos objetivos globales se traducen en acciones concretas y tangibles que ya estamos implementando y que demuestran cómo la teoría se convierte en práctica en nuestro día a día:
- Energía renovable: el 89% de la electricidad que consume Henkel para la fabricación de sus productos y tecnologías para la industria a nivel global ya proviene de fuentes renovables. En España, nuestra planta de producción en Montornés del Vallés (Barcelona) es neutra en carbono, utiliza energía 100% renovable y autogenera el 25% de sus necesidades gracias a los 18.600m² de paneles solares.
- Diseño ecológico y circularidad: estamos rediseñando nuestros productos para que sean más sostenibles. Por ejemplo, los adhesivos bio-basados de Loctite han permitido reducir más del 60% de las emisiones; Wipp Express contiene un 92% de ingredientes biodegradables y ha reducido hasta un 70% el plástico por dosis; y los envases de Vernel están hechos con plástico 100% reciclado.
- Logística y transporte: optimizamos nuestras redes de distribución y exploramos alternativas como vehículos eléctricos o con combustibles verdes. Hemos incorporado camiones 100% eléctricos en Cataluña, permitiéndonos evitar más de 36.500kg de CO2 anuales. Y utilizamos duo-trailers con HVO en la zona centro y levante, y en rutas semanales a Sevilla y Francia, reduciendo significativamente las emisiones por trayecto.
- Colaboración con proveedores: a través del programa Climate Connect, trabajamos con nuestros proveedores para recopilar datos de emisiones, definir acciones conjuntas y mejorar prácticas sostenibles. Esto incluye el uso de materiales reciclados y renovables, y la medición precisa de la huella de carbono de cada producto en toda la cadena de suministro.
En Henkel Ibérica, entendemos que el camino hacia el Cero Neto requiere un esfuerzo continuo, una mentalidad de innovación constante y una colaboración con todos nuestros grupos de interés, desde nuestros empleados hasta nuestros proveedores y consumidores. Nuestra visión es clara: ayudar a limitar el calentamiento global a 1,5ºC, de acuerdo con el Acuerdo de País; y estamos comprometidos a hacer nuestra parte para lograrlo. Este compromiso es el motor que impulsa a nuestra compañía, guiándola hacia un futuro próspero y responsable, donde la sostenibilidad no es solo una palabra, sino un principio que define cada interacción y cada decisión.
Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: Día Internacional Contra el Cambio Climático

