El bienestar laboral ha dejado de ser un beneficio adicional para convertirse en un requisito esencial para la sostenibilidad y el crecimiento empresarial. Una encuesta de Forbes Advisor (2025) revela que el 88% de los trabajadores lo considera tan importante como la remuneración. En este contexto, Essity, líder global en higiene y salud, ha integrado medidas de salud, seguridad, desarrollo e inclusión en su cultura organizativa, lo que impacta directamente en la productividad y en la retención de talento.
Para Karen Valenzuela, gerente de Recursos Humanos de Essity Chile, el éxito empresarial depende de construir entornos saludables, seguros e inclusivos. La compañía ha reducido en un 66% su tasa de accidentes desde 2019, refuerza la diversidad con programas de liderazgo inclusivo que han involucrado a más de 4.500 colaboradores en el mundo, y promueve la capacitación continua como motor de crecimiento personal y profesional. Además, mantiene políticas de transparencia y equidad salarial que fortalecen la confianza entre los equipos.
Essity busca generar un ambiente de confianza y empatía donde el bienestar de las personas sea tan relevante como los resultados. “Cuando el empleado crece, la empresa crece”, enfatiza Valenzuela, destacando que valorar a las personas es un principio transversal en la gestión corporativa. En un escenario donde solo el 7% de las empresas en América Latina califica sus programas de bienestar emocional como “excelentes” (Aon e Ipsos), Essity marca la diferencia al integrar este enfoque en sus planes de desarrollo y gestión de personas.
De esta manera, la compañía consolida una ventaja estratégica y sostenible, demostrando que invertir en el bienestar laboral no solo eleva la satisfacción de los colaboradores, sino que también potencia la innovación, el compromiso y la competitividad a largo plazo.