Con 80 años de historia, Virutex Ilko ha consolidado una estrategia de sustentabilidad que busca integrar la economía circular, la innovación responsable y el abastecimiento consciente como pilares de su operación en Latinoamérica. Desde su planta en Cerrillos, en la Región Metropolitana de Santiago de Chile, hasta sus operaciones en Colombia, Perú, México y Argentina, la compañía mantiene su propósito: vivir mejor en un mundo más simple, más limpio y más sustentable.
Alejandra Paola Duranti, Gerente Corporativo de Sustentabilidad & Economía Circular, señaló a Corresponsables que la sustentabilidad en Virutex Ilko es una convicción. “Tenemos incorporado en nuestro ADN la innovación, apalancada por la sustentabilidad”. Esta visión se concreta en un portafolio de productos con atributos de sustentabilidad: materiales reciclados, reciclables o de origen vegetal, como paños compostables o tablas de bambú con certificación de manejo responsable. “Siempre trabajamos con validación de externos para evitar el greenwashing”, enfatizó.
La estrategia de sustentabilidad, formalizada desde 2020 y actualizada durante 2023, cuyos ejes principales son fortalecer la comunicación en temas de triple impacto y mejorar el monitoreo de las iniciativas de sustentabilidad. Un especial papel corresponde a las iniciativas en los ámbitos de: abastecimiento más consciente, compromiso con el planeta, innovación en productos y una cultura organizacional más sustentable. En abastecimiento, la empresa aplica la norma ISO 20400 para evaluar proveedores estratégicos e impulsa compromisos de reducción de huella de carbono. “Nos alineamos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y trabajamos con proveedores con criterios sociales y ambientales claros”, dijo Duranti.
Economía circular para vivir mejor
En el modelo de negocios de la empresa, la economía circular ocupa un rol protagónico. La empresa ha desarrollado un modelo de producción que integra el plástico reciclado como insumo en múltiples categorías de productos.
El compromiso ambiental de Virutex también se refleja en su participación en Science Based Targets (SBTi), iniciativa de Naciones Unidas para medir y reducir emisiones. “Asumimos este reto en 2020, en plena pandemia. Ha sido complejo, pero seguimos avanzando y buscando siempre la mejora continua”, explica. A esto se suma el uso de energías renovables, plantas de tratamiento de agua y sistemas de eficiencia energética en sus instalaciones.
En economía circular, la compañía ha desarrollado un modelo productivo que reutiliza más de 1.200 toneladas de plástico al mes, con plantas de reciclaje propias y alianzas con más de 50 organizaciones. “Nosotros transformamos residuos industriales en insumos para nuevos productos. Un ejemplo es la botella de lavalozas hecha 100% con PET reciclado a partir de residuos de etiquetas”, comentó. Este trabajo se realiza en conjunto con empresas como Concha y Toro o Iansa, y con recolectores de base. “Queremos demostrar que la colaboración puede ser una herramienta de transformación real. Nuestras plantas de reciclaje valorizan del scrap para convertirlo en productos que vuelven al hogar”, agregó Duranti.
La comunicación al consumidor es otro punto clave. Virutex certifica, a través de entidades externas, los atributos de sustentabilidad de sus productos, ya sea en contenido reciclado, compostabilidad o efectividad de limpieza. “Los consumidores son más conscientes y exigentes. Nosotros queremos estar a la altura de esta exigencia, respaldando nuestros compromisos y declaraciones.”, recordó.
Sustentabilidad accesible
“Nuestro objetivo es hacer accesible los productos con atributos de sustentabilidad”, sostiene. Esto implica diseñar productos con menor impacto ambiental, pero manteniendo precios ajustados a la realidad económica regional.
El camino ha sido desafiante, sobre todo en mercados donde persiste desinformación sobre conceptos como biodegradabilidad o reciclabilidad. “Hemos tenido que hacer muchos esfuerzos en educación interna y externa”, reconoce.
Virutex se certificó en 2022 como Empresa B para todos sus procesos, productos y marcas en los mercados donde está presente, y actualmente lleva a cabo su recertificación. Así se aspira a consolidar una cultura organizacional que integre la sustentabilidad a todos los niveles; y que permita ofrecer opciones más sustentables a los consumidores en cada categoría de productos de limpieza, desinfección y cocina.
Alejandra Duranti concluye, “Estos logros han sido gracias al compromiso de todo el equipo, desde Gerencia General a nuestro personal de plantas. Seguimos trabajando para alcanzar nuestro propósito corporativo de “vivir mejor, en un planeta más limpio, más simple y más sustentable”.
Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: Desarrollo empresarial sostenible en Chile