Con cuatro décadas de trayectoria en el sector tecnológico, CompuSoluciones se ha consolidado como un mayorista de tecnología con una mirada integral que trasciende el negocio. Con operaciones en Bogotá, Santiago de Chile y Texas, además de México, la compañía no solo ha sido reconocida durante once años consecutivos como una de las Mejores Empresas Mexicanas, sino que ha fortalecido su identidad con una estrategia de responsabilidad social profundamente transversal. “Queremos que todos los colaboradores se involucren activamente, no como espectadores, sino como agentes del cambio”, afirmó Juan Pablo Pizá Fernández, Gerente de Crédito y Cobranza y Servicios Financieros.
La estrategia de sostenibilidad de CompuSoluciones está cimentada sobre cuatro pilares fundamentales: ética, capacitación, compromiso con la sociedad y cuidado del medio ambiente. Estos principios no son meramente declarativos, sino que se traducen en acciones concretas a través de una red de comités autogestionados por empleados. Los comités Conecta, Actívate, ECOS y Participación Ciudadana lideran iniciativas específicas en cada uno de estos ámbitos, permitiendo una participación genuina desde todas las áreas de la empresa. “Cada comité identifica causas, organiza actividades y moviliza recursos; no hay imposiciones, hay compromiso genuino”, explicó Pizá.
Uno de los proyectos más emblemáticos de la organización es CRECE, un programa de educación básica dirigido a colaboradores que no concluyeron sus estudios. A través de alianzas con el INEA y los Colegios de Bachilleres, y con el apoyo de facilitadores internos —muchos de ellos gerentes y directores que imparten clases voluntariamente—, el programa ha permitido que varios trabajadores completen su educación formal. “Una de nuestras colaboradoras pasó de no tener primaria a estar hoy estudiando psicología. Eso no habría sido posible sin el respaldo del tiempo laboral asignado para estudiar”, explicó Pizá. La empresa otorga una hora diaria del horario laboral para que los participantes puedan asistir a clases.
Complementando esta iniciativa, el programa Vivienda Digna se orienta a mejorar las condiciones habitacionales de los colaboradores. “Nos dimos cuenta de que teníamos personas que vivían sin puertas ni ventanas. No se trata de lujos, sino de dignidad: piso, baño, cocina. Eso es lo que buscamos asegurar”, añadió. El financiamiento se distribuye entre la empresa (50%), los comités (40%) y el colaborador (10%), garantizando corresponsabilidad y sostenibilidad.
En paralelo, CompuSoluciones ha apostado por la innovación tecnológica como herramienta para el desarrollo empresarial responsable. La integración de la plataforma AltScore en sus procesos de crédito ha permitido reducir el fraude, minimizar la morosidad y mejorar la toma de decisiones. Además, el área de Desarrollo Empresarial brinda asesorías sin costo a sus clientes para que puedan fortalecer sus capacidades administrativas y financieras. “Creemos en el tema GANAR-GANAR donde lo que buscamos es que nuestros asociados crezcan y así nosotros crecemos, y al mismo tiempo apoyamos a la comunidad”, remarcó Pizá.
La formación constante es otro eje central. Más allá de los cursos internos, la empresa ofrece programas abiertos para familiares, proveedores y clientes, abordando desde habilidades blandas hasta especializaciones técnicas. Entre los más recientes, destaca un taller de oratoria donde convergen actores de distintos niveles del ecosistema. “Nuestro enfoque educativo no se limita a lo técnico, queremos formar personas con pensamiento crítico y compromiso social”, indicó.
La incorporación de nuevas tecnologías, particularmente la inteligencia artificial, también ha sido abordada con una perspectiva crítica y formativa. Un equipo especializado dentro de la empresa lidera talleres, comparte tendencias y promueve su adopción responsable. “Es una herramienta poderosa, pero debe usarse con criterio. Por eso damos prioridad a la educación antes que a la implementación”, enfatizó Pizá. Este enfoque se extiende también a programas de inclusión digital, donde CompuSoluciones colabora con instituciones educativas en zonas vulnerables para garantizar conectividad, equipamiento y formación básica, antes de introducir herramientas avanzadas.
Los comités de responsabilidad social han demostrado ser un vehículo clave para esta transformación. El comité Conecta, por ejemplo, ha liderado campañas para recaudar fondos destinados a temas de salud, educación, bienestar social, entre otros, con participación de los colaboradores y aportaciones equiparadas por la empresa. El comité ECOS ha promovido actividades ambientales como reforestaciones y rescate de fauna. Actívate se enfoca en salud física y mental, mientras que Participación Ciudadana busca fomentar el involucramiento en causas comunitarias y procesos democráticos.
“No se trata solo de que la empresa haga donaciones o firme cheques; se trata de que cada colaborador se sienta parte de un propósito mayor”, comentó Pizá. Esta visión ha sido clave para mantener el compromiso interno, generar cohesión y alinear la operación diaria con los principios que sustentan la visión corporativa.
La visión institucional de CompuSoluciones refleja esta orientación. “Antes de pensar en rentabilidad, trabajamos por brindar un excelente servicio, promover el desarrollo personal y profesional, vivir nuestros valores, ser punta tecnológica y cuidar el entorno. Solo después de cumplir con todo eso, hacemos negocio”, concluyó Pizá.