B Corp llegó a nuestro país en 2015 con una profunda convicción: es posible transformar el modelo económico desde el tejido empresarial, generando valor para todas las personas y el planeta. Hoy, observamos con optimismo cómo un número creciente de organizaciones reconoce su papel clave en la construcción de una economía más equitativa, inclusiva y regenerativa. Este recorrido nos invita a valorar los avances conseguidos con gratitud y a renovar nuestro compromiso con el futuro.

Nacido en 2006 en Estados Unidos de la mano de B Lab, B Corp es el movimiento global de personas que utilizan la fuerza de las empresas para cambiar el mundo. Está presente en más de 100 países y ya son cerca de 10.000 empresas, casi 300 de ellas españolas, las que han decidido avanzar hacia un nuevo paradigma empresarial.

En estos años, España se ha consolidado como uno de los países con mayor dinamismo dentro del movimiento B Corp en Europa, articulando una comunidad sólida, diversa y comprometida. Las B Corps comparten una visión común: redefinir el éxito empresarial, integrando en sus decisiones el impacto social, ambiental y económico de su actividad.

En 2024, la facturación agregada de las B Corps en España alcanzó los 12.340 millones de euros. Sin embargo, más allá de los datos cuantitativos, lo verdaderamente relevante es la intencionalidad que guía y lleva a actuar a estas organizaciones: la voluntad de repensar sus prácticas, de mirarse hacia dentro, de cuestionarse no solo cuánto se gana, sino a qué costo y en beneficio de quién. En esa reflexión crítica, valiente y transformadora, se encuentra el verdadero motor del cambio.

Tejiendo alianzas para impulsar el cambio

Desde sus inicios, una de las mayores fortalezas del movimiento B Corp en España ha sido su capacidad para establecer alianzas estratégicas y consolidar una presencia territorial sólida. Actualmente, contamos con seis Comunidades B Locales en regiones clave como Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana, Andalucía y el norte del país, que impulsan iniciativas transformadoras con un enfoque local y colaborativo.

Otras iniciativas público-privadas como Barcelona+B, que ha movilizado a más de 600 organizaciones comprometidas con una ciudad más sostenible, evidencian el poder de la acción territorial. Bajo este marco, proyectos como Eduquem+B, orientado a llevar competencias clave en sostenibilidad a las aulas, demuestran que la transformación empieza conectando con los contextos más cercanos y apostando por la educación como herramienta de cambio.

Este espíritu colaborativo sigue fortaleciéndose a través de nuevas sinergias, como la alianza con la Fundación Mobile World Capital, que promueve la integración de criterios sostenibles y responsables en el ecosistema tecnológico. En todos estos espacios, se reafirma una convicción compartida: el cambio sistémico se construye desde lo colectivo y con vocación de impacto.

De la transformación cultural a la legislación

El impacto del movimiento B Corp ha trascendido el ámbito empresarial para permear también la esfera institucional y ciudadana. Un ejemplo emblemático de esta evolución fue la presentación en el Congreso de los Diputados de las propuestas ciudadanas de «El Futuro es Ser B» del pasado 2024, un ejercicio de innovación democrática multistakeholder impulsado junto a Demos Lab y respaldado por más de 45 expertos y expertas. Esta iniciativa recogía demandas concretas para avanzar hacia un modelo empresarial más justo, inclusivo y sostenible, entre las que destacaba la aprobación (aún pendiente) del reglamento de las Sociedades de Beneficio e Interés Común (SBIC).

La creación de esta figura jurídica representa uno de los hitos más relevantes del movimiento hasta la fecha. Las SBIC son el mecanismo que permite reconocer legalmente a las empresas con propósito: aquellas que generan valor social, económico y ambiental. Impulsada por B Lab Spain y respaldada por más de 400 organizaciones y 30.000 firmas ciudadanas, la propuesta ha sido aprobada, aunque todavía está pendiente de la aprobación de su reglamento.

En paralelo, la transformación cultural sigue siendo un pilar clave para avanzar en esta visión de cambio sistémico. La sensibilización empresarial y ciudadana ha sido prioritaria, con campañas de amplio alcance que han contribuido a instalar un nuevo relato empresarial en la conciencia colectiva. En 2022, la campaña «Ser B» alcanzó a más de 20 millones de personas, y en 2024, «Se Escribe con B» superó los 25 millones de impactos, invitando a la reflexión con una pregunta directa: ¿Te gusta cómo está el mundo? Únete a reescribir la historia. Hoy, en España, una de cada tres personas reconoce B Corp, mientras que el 80% de la sociedad en nuestro país afirma confiar en este movimiento. Con estos esfuerzos, buscamos consolidar una narrativa que promueva la prosperidad compartida, la justicia social y la regeneración ambiental como ejes centrales de un nuevo contrato social y económico.

Nuevos estándares que suben el listón empresarial

Este 2025, el movimiento B Corp ha llevado a cabo la séptima y más profunda actualización de sus estándares globales, marcando un hito en su evolución. Estos nuevos estándares, que entrarán en vigor en 2026, representan una transformación estructural sin precedentes, diseñada para responder a los crecientes retos sociales y ambientales del presente, así como a un contexto global cada vez más exigente en términos de sostenibilidad, transparencia y legislación.

Dejando atrás el modelo de puntuación flexible y acumulativa, el nuevo enfoque establece requisitos obligatorios en siete áreas clave: Propósito y Gobernanza, Acción Climática, Derechos Humanos, Trabajo Justo, Circularidad, Justicia, Equidad, Diversidad e Inclusión y Acción Colectiva.

Con nuestros estándares renovados, nos adentramos en una nueva década con una comunidad más sólida, cohesionada y ambiciosa, preparada para afrontar los desafíos globales desde la colaboración, la innovación y el compromiso. El camino continúa, con una meta compartida: liderar el cambio sistémico hacia un futuro más justo, inclusivo y regenerativo.

Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: B Corp – Empresas con Propósito

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Hay brújulas que no marcan el norte, sino el propósito. Para muchas empresas, la certificación B Corp ha sido ese punto de orientación que permite conjugar impacto y rentabilidad sin perder el rumbo. En Impact Hub lo reconocimos de inmediato: compartíamos valores, visión y una convicción firme de que los negocios deben ser parte activa de la transformación social. Obtener el sello B Corp fue un paso natural para consolidar lo que ya formaba parte de nuestra identidad.

Desde que conseguimos la certificación en 2018, formar parte del movimiento B Corp ha significado un gran avance. Nos ha conectado con una comunidad global de empresas que no se conforman con cumplir, sino que aspiran a liderar. Organizaciones de sectores muy distintos que tienen en común el compromiso de gestionar de forma responsable, generar un impacto positivo y demostrar que otra manera de hacer empresa es posible. Empresas que no solo actúan con propósito, sino que lo integran en su modelo de negocio.

En nuestro caso, el proceso de certificación no fue simplemente un trámite, sino una oportunidad para poner a prueba nuestra propia coherencia. El recorrido hasta lograr el sello nos permitió revisar cómo trabajábamos, detectar carencias, profesionalizar procesos e incorporar indicadores que hoy forman parte de nuestro sistema de evaluación interna. La autoevaluación B Corp nos llevó a preguntarnos por qué hacíamos lo que hacíamos y cómo podíamos mejorarlo. Ese ejercicio de mirada crítica ha sido clave para crecer con consistencia y para medir, de forma periódica, los efectos reales de nuestras actividades en todos los grupos de interés: comunidad, empleados, clientes, proveedores y accionistas.

Una de las grandes fortalezas del modelo B Corp es precisamente su enfoque integral. La certificación no se limita a evaluar acciones sociales o ambientales aisladas: exige una visión sistémica de la empresa. Desde la gobernanza hasta el impacto medioambiental, desde la gestión del talento hasta la transparencia en la cadena de valor. Y lo hace con un marco concreto, medible y dinámico. La puntuación se revisa y renueva cada dos años, lo que obliga a las empresas a seguir evolucionando. En nuestro caso, ese ejercicio de mejora continua se ha convertido en una palanca estratégica.

Pero quizá lo más transformador es cómo B Corp influye en las decisiones del día a día. Hoy, en Impact Hub, antes de asumir un nuevo proyecto, establecer una alianza o tomar una decisión estratégica, nos preguntamos: ¿está alineado con los estándares B Corp?, ¿contribuye al bienestar compartido?, ¿nos acerca a ser la empresa que queremos ser? No se trata solo de cumplir, sino de avanzar hacia niveles de impacto más ambiciosos, con autenticidad y consistencia.

También hemos confirmado que este compromiso genera confianza. La certificación B Corp se ha convertido en un elemento diferenciador en el mercado, hasta el punto de que algunas organizaciones han elegido trabajar con nosotros precisamente por eso. Saben que compartimos valores, que cuidamos la calidad de las relaciones, que no se trata de una etiqueta de marketing. Por ejemplo, entidades como Triodos Bank u Oxfam Intermón forman parte de nuestra comunidad porque encuentran en nosotros un entorno coherente con sus principios. Estas alianzas van más allá de una relación cliente-proveedor: se construyen sobre una base común de propósito, ética y visión a largo plazo.

Un camino de mejora continua

A veces se plantea la falsa disyuntiva entre sostenibilidad y rentabilidad. Para nosotros, nunca ha habido contradicción. Desde nuestros orígenes, entendimos que el impacto positivo debía ser parte central del modelo de negocio. No es un añadido, es la razón de ser. Creamos espacios que fomentan el emprendimiento con propósito, el trabajo colaborativo, la innovación social. Y lo hacemos generando valor económico, sí, pero también social, cultural y medioambiental. Esa es nuestra forma de ser rentables.

Recomendaríamos a cualquier empresa que explore el camino B Corp. Certificarse implica mirarse con honestidad, asumir compromisos reales, y apostar por una manera de trabajar más exigente y transformadora. Pero también más coherente, más resiliente y más alineada con los desafíos del presente.

Y es que ser B Corp no es una meta. Es un camino. Un proceso de mejora constante, en el que siempre hay margen para hacerlo mejor. Porque la sostenibilidad no tiene punto final. Es una práctica diaria, una elección consciente y un compromiso con las generaciones futuras.

Mirando hacia adelante, tenemos la convicción de que las empresas B Corp van a ser protagonistas en la construcción de un nuevo modelo económico. Son organizaciones que ya están demostrando que es posible conjugar competitividad con impacto, ambición empresarial con regeneración social. Son empresas más transparentes, más inclusivas, más responsables. Y eso, en un mundo tan complejo como el actual, es mucho más que una ventaja competitiva: es una necesidad urgente.

Invertir con propósito ya no es una tendencia. Es una apuesta inteligente. Y en esa apuesta, las B Corp no son el futuro, son el presente que ya está marcando el cambio.

Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: B Corp – Empresas con Propósito

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Hoy, decir lo correcto ya no basta: las marcas deben hacer lo correcto y ser capaces de demostrarlo. Los consumidores, especialmente Millennials y Gen Z, exigen un compromiso real con causas sociales y medioambientales, y no perdonan la incoherencia ni los gestos vacíos.
Las cifras son claras:

• El 59% de los consumidores tiene en cuenta los compromisos sociales y medioambientales de una empresa a la hora de comprar.
• El 51% da por hecho lo peor si una marca guarda silencio ante temas importantes.
• Solo el 34% cree que las empresas son realmente transparentes.
• Y apenas el 23% confía en los mensajes de sostenibilidad de las marcas.

Con el greenwashing, pinkwashing y rainbow-washing inundando nuestras redes, no sorprende que la confianza pública esté bajo mínimos, especialmente en redes sociales, donde la desinformación se propaga rápidamente y las marcas están bajo escrutinio constante.
Entonces, ¿cómo pueden las marcas destacar y comunicar sus valores con credibilidad?

Desde Good Rebels hemos profundizado en este reto junto a empresas que lideran en sostenibilidad y comunicación ESG. Estas son las claves que compartimos para construir un relato auténtico, coherente y eficaz:

Todo empieza por cuatro principios clave:

1. Coherencia: La sostenibilidad no es una campaña estacional. Las acciones, contenidos y mensajes de una marca deben estar alineados en el tiempo y a través de todos los canales. Las incoherencias se detectan fácilmente —y pueden echar por tierra incluso los esfuerzos mejor intencionados. Un buen ejemplo es Wave of Change de Iberostar. Sus objetivos de sostenibilidad están integrados en el modelo de negocio y se comunican de forma clara en todas sus plataformas, reforzando una narrativa de marca coherente.
2. Honestidad: Los consumidores no esperan perfección, pero sí transparencia. De hecho, el 85% afirma que un historial de apertura les hace más propensos a perdonar errores. La pregunta es: ¿estás mostrando toda la imagen? Las marcas más creíbles son las que dicen: “Esto es lo que estamos haciendo, aquí es donde fallamos y esto es lo que vamos a mejorar”.
3. Claridad: Olvida la jerga. Si la gente no entiende tus valores, no confiará en ellos. Un mensaje claro y directo —respaldado por datos reales— marca la diferencia. Los consumidores no quieren oír que eres sostenible: quieren ver cómo lo eres.
4. Autenticidad: Las personas confían en personas, no en corporaciones. Las marcas que comparten historias reales, avances concretos y contenidos entre bastidores humanizan su mensaje y lo hacen más cercano.

¿Y cómo se ve una comunicación creíble de RSC en redes sociales?

Recomendamos siete estrategias para generar confianza y engagement:

1. Unifica tus mensajes
   Tu audiencia ve una sola marca, no un equipo de RSC, otro de producto y otro de marketing. Asegúrate de que los mensajes sobre sostenibilidad estén alineados con el tono y la voz de tu marca en redes, web, medios y producto. Nada de compartimentos estancos.
2. Asume tus imperfecciones
   Intentar parecer perfecto es el camino más rápido hacia una crisis. Sigue el ejemplo de Oatly: la marca creó una web donde recopila todas las críticas que ha recibido y explica cómo está respondiendo. No es postureo: es transparencia en acción.
3. Demuestra, no declares
   Evita afirmaciones vagas como “nos importa el planeta”. En su lugar, comparte métricas:

• ¿Cuántas toneladas de residuos has reducido?
• ¿Con cuántos productores locales colaboras?
• ¿Cuál es tu próximo objetivo de sostenibilidad?
  Los consumidores quieren pruebas, no promesas.

1. Las personas confían en las personas El contenido generado por empleados o usuarios funciona mejor —y se percibe como más auténtico— que los mensajes corporativos. El 76% de los consumidores confía más en el contenido de los empleados.
   Genera 5 veces más engagement.Marcas como Allbirds empoderan a sus empleados para compartir su experiencia en sostenibilidad, adaptando el formato y el tono a cada plataforma: desde un TikTok espontáneo hasta una actualización del CEO en LinkedIn.
2. Adapta el formato a cada plataforma El mensaje puede ser el mismo, pero la forma de contarlo debe cambiar.
3. En LinkedIn, profundiza con insights del sector y liderazgo de opinión.
4. En TikTok o Instagram, opta por contenidos cercanos, nativos y espontáneos.
5. Piensa a largo plazo: Publicar algo el Día de la Tierra no es una estrategia de sostenibilidad. Tus compromisos deben estar integrados en el modelo de negocio, medirse con indicadores claros y comunicarse de forma continua —no solo cuando es tendencia.
6. Ve más allá del “propósito”: Decir que “queremos mejorar el mundo” ya no convence. La gente quiere saber:

• ¿Cómo me afecta esto?
• ¿Por qué debería importarme?
• ¿Qué impacto estás logrando realmente? Las marcas que triunfan son las que cuentan historias valientes, específicas, e invitan a su comunidad a formar parte del cambio.

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En Serlimar, entendemos que el trabajo no es solo una fuente de ingresos, sino una herramienta poderosa para la inclusión social, el desarrollo personal y el bienestar colectivo. Pertenecer al movimiento B Corp ha reforzado esta visión, alineando nuestra actividad empresarial con un propósito claro: generar un impacto positivo en las personas y en el planeta.

Como empresa certificada B Corp —la primera en el sector servicios de limpieza en España— hemos asumido el compromiso de ir más allá del beneficio económico. Esto implica poner a las personas en el centro de nuestras decisiones, desde nuestros equipos hasta las comunidades con las que colaboramos. En este sentido, la inclusión laboral es uno de los pilares fundamentales de nuestra estrategia.

Buscamos colaboraciones activas con entidades sociales y organizaciones benéficas para facilitar la inserción laboral de personas en situación de vulnerabilidad y crear un beneficio real para nuestra comunidad. Estas acciones no son filantropía puntual, sino parte de una cultura empresarial que entiende el trabajo como un motor de transformación social, valores que han marcado nuestra trayectoria empresarial desde la fundación en 1972.

Desde nuestra certificación en marzo de 2025, hemos conectado con una comunidad de empresas que comparten valores similares. Esta red nos inspira, nos reta y nos permite compartir buenas prácticas en materia de inclusión, diversidad y desarrollo humano. Las sinergias que se generan en este ecosistema son una fuente constante de aprendizaje y evolución.

Definitivamente, creemos que el trabajo digno, inclusivo y saludable no es solo una aspiración ética, sino una ventaja competitiva. Pasamos mucho tiempo en el trabajo y, para nosotros, es aún más significativo porque no fabricamos productos; ofrecemos servicios. Y esos servicios los brindan personas excepcionales. Las empresas que cuidan de las personas que las conforman construyen relaciones más sólidas, equipos más comprometidos y un impacto más duradero, un legado. Las personas son el centro de nuestra actividad y debemos invertir en ellas. Ser B Corp nos ha dado el marco, la comunidad y la legitimidad para avanzar con firmeza en esta dirección.

Vivimos de primera mano cómo el compromiso con la inclusión y el bienestar transforma no solo a una empresa, sino también a las personas que forman parte de ella. Desde nuestros inicios el propósito ha sido claro, acompañar a nuestro equipo en su desarrollo, generando entornos saludables. Este enfoque nos ha permitido atraer y retener talento, mejorar la productividad y, lo más importante, crear un ambiente de trabajo donde todos se sienten valorados y respetados.

La comunidad B Corp nos ha brindado la oportunidad de colaborar con otras empresas que comparten nuestra visión. Esta comunidad de empresas comprometidas nos ha permitido aprender de las mejores prácticas en inclusión y bienestar laboral, y poder aplicar estas lecciones en nuestra propia empresa. Estamos orgullosos de ser parte de un movimiento que está redefiniendo lo que significa ser una empresa exitosa.

Creemos que el trabajo puede y debe ser una fuerza para el bien. Ser parte de B Corp nos ha dado las herramientas y la comunidad para hacer realidad esta visión. Estamos comprometidos a seguir promoviendo la inclusión y el bienestar laboral, y a demostrar que las empresas son responsables de generar un cambio positivo.

Porque cuando las empresas se alinean con un propósito común, el trabajo deja de ser solo una actividad económica para convertirse en una fuerza transformadora.

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¿Puede una empresa ser rentable sin renunciar a su impacto positivo? En Cloudworks creemos no solo que es posible, sino que es imprescindible. En un contexto marcado por la incertidumbre energética, social y medioambiental, entendemos la sostenibilidad como un eje estratégico que fortalece nuestra propuesta de valor y garantiza nuestra viabilidad a largo plazo.

Desde nuestro nacimiento, apostamos por transformar la forma de trabajar en las ciudades. En Cloudworks, el coworking no es solo un modelo que adoptamos: es la esencia de nuestro negocio y una herramienta poderosa para generar impacto positivo. Por definición, el coworking es una forma más sostenible de ocupar el espacio: se comparten salas, servicios, limpieza, suministros y recursos que antes se gestionaban de forma individual. Esta optimización reduce el desperdicio y promueve un uso racional de materiales, energía y metros cuadrados.

Más allá del espacio, fomentamos comunidades empresariales con propósito. Colaboramos con proveedores que comparten nuestros valores: utilizamos energía verde, apostamos por el catering responsable y promovemos prácticas de limpieza ecológica. Entendemos la sostenibilidad como una red de decisiones conscientes que va desde lo cotidiano hasta lo estructural. Nuestro compromiso no se basa solo en reducir impactos negativos, sino en contribuir activamente a una transformación positiva del entorno.

Sostenibilidad también es economía

Existe una falsa dicotomía entre sostenibilidad y rentabilidad. A menudo se conciben como objetivos opuestos, cuando en realidad se refuerzan mutuamente. Un edificio ecoeficiente consume menos energía y tiene menores costes operativos. Reducir residuos no solo es una práctica responsable, sino que también disminuye los costes asociados a su gestión.

La verdadera sostenibilidad es también la que permite a un proyecto permanecer, crecer con coherencia y dejar un legado. En Cloudworks, entendemos que un modelo que apuesta por el largo plazo, por la estabilidad del equipo y por relaciones sólidas con clientes y proveedores, es también un modelo rentable. Un negocio que cuida su entorno, cuida también su capacidad de adaptación y resiliencia. Y eso, en tiempos volátiles, es una ventaja competitiva.

Talento y empresas responsables: una nueva demanda

Nuestros espacios atraen a empresas y profesionales que buscan coherencia entre sus valores y su entorno laboral. Esta afinidad no es casualidad. El 76% de nuestros coworkers consideran que la sostenibilidad es un aspecto importante, según la encuesta de satisfacción que realizamos en 2024. No se trata solo de metros cuadrados: se trata de pertenencia, propósito y cultura.

Para las organizaciones, trabajar en espacios responsables también implica beneficios operativos: mayor retención de talento, equipos más comprometidos y reducción de costes derivados de la rotación o la baja implicación. Un equipo motivado, alineado con un propósito compartido, es más estable y, por tanto, más rentable.

Además, la demanda de espacios responsables no deja de crecer. Cada vez más empresas eligen proveedores que comparten su visión del mundo y su compromiso con el impacto. Estar alineados con estos valores nos posiciona en un mercado que valora la coherencia, la transparencia y la capacidad de generar bienestar más allá del beneficio económico.

Ser B Corp: una exigencia que nos transforma

Nuestra adhesión al movimiento B Corp no ha sido una medalla simbólica, sino un compromiso que nos exige y nos transforma. Este estándar global nos obliga a revisar, mejorar y comunicar nuestras decisiones estratégicas con rigor. Cada evaluación nos impulsa a revisar procesos, medir nuestro impacto y avanzar hacia un modelo cada vez más consciente.

La certificación B Corp no solo refuerza nuestra credibilidad ante clientes e inversores, sino que nos conecta con una comunidad global que comparte los mismos retos y aspiraciones. En Cloudworks hemos participado en iniciativas vinculadas al movimiento B Corp, como la jornada que acogimos en nuestro centro de Castellana, cediendo el espacio para reunir a referentes del sector. Estos encuentros nos permiten compartir aprendizajes, generar sinergias y reforzar nuestro compromiso con una forma de hacer empresa más consciente.

Invertir en futuro

Hoy más que nunca, sostenibilidad y rentabilidad no son términos enfrentados. Son, de hecho, dos caras de una misma moneda: la de un futuro empresarial que entiende que prosperar implica cuidar, compartir y construir con visión de largo plazo.

En Cloudworks, seguiremos apostando por este camino. Porque no se trata solo de ofrecer espacios de trabajo, sino de transformar el impacto que tienen las organizaciones en su entorno. Ser parte del cambio no es una opción: es una inversión de futuro.

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En un contexto global marcado por la urgencia climática y la transformación de los modelos económicos, la sostenibilidad ha dejado de ser una opción para convertirse en una exigencia ineludible. Pero lejos de representar un límite, se ha revelado como el motor más poderoso para repensarlo todo: desde cómo diseñamos nuestras estrategias hasta cómo medimos el valor real que generamos como empresas.

Formar parte de una comunidad como B Corp nos ha permitido vivir esta transformación desde dentro, junto a cientos de compañías que, como la nuestra, han elegido poner el propósito en el centro. No como un mensaje de marketing, sino como una brújula estratégica que orienta cada decisión. Y desde ahí, lo que emerge no es solo un cambio cultural: es una ola de innovación que atraviesa lo tecnológico, lo social y lo medioambiental.

Una nueva economía basada en la regeneración

En Retree, entendemos la sostenibilidad no como una etiqueta, sino como un marco que nos obliga a mirar más lejos. Si los retos son sistémicos —la desertificación del suelo, el éxodo rural, la pérdida de biodiversidad o la falta de trazabilidad en la compensación de emisiones—, también lo deben ser nuestras respuestas. Por eso, apostamos por un enfoque regenerativo. No se trata únicamente de plantar árboles, sino de restaurar ecosistemas con sentido, de devolver la vida a suelos que ya no pueden hacerlo por sí solos y de contribuir al desarrollo de comunidades que han sido históricamente olvidadas. Muchas de las empresas con las que colaboramos no llegaron a nosotros buscando una solución tecnológica. Lo que buscaban, en realidad, era una forma veraz, creíble y medible de reflejar su compromiso. Un relato con evidencias, conectado con las nuevas exigencias normativas, pero también con una ciudadanía que exige hechos, no promesas. Y eso es precisamente lo que hoy permite la tecnología cuando se pone al servicio del propósito.

Tecnología que hace visible lo invisible

En un mundo donde la confianza se mide en datos, la innovación se convierte en una aliada indispensable para dar credibilidad a los compromisos de sostenibilidad. Desde el inicio, entendimos que una transformación real pasaba por desarrollar herramientas capaces de ofrecer trazabilidad total, transparencia y rigor científico. Imaginar que puedes mostrar, en tiempo real, cómo tu compromiso ambiental mejora vidas, captura carbono y revitaliza paisajes. Imaginar que puedes compartir esos avances con tus grupos de interés con la misma precisión con la que gestionas tus KPIs financieros. Hoy, eso ya es posible.

La integración de algoritmos basados en inteligencia artificial, imágenes satelitales y modelización climática nos permite estimar con precisión la absorción de CO₂, anticipar riesgos como los incendios forestales y medir otros indicadores clave como el beneficio hídrico o el empleo rural generado. Pero lo importante no es la tecnología en sí, sino lo que desencadena: confianza, conexión, impacto duradero.

La fuerza de una comunidad que no se conforma

Lo más transformador de formar parte del movimiento B Corp no es la certificación. Es la sensación de no estar solos. De saber que existen otras empresas que también han decidido ser parte de la solución, que comparten aprendizajes, que empujan hacia una economía más justa, regenerativa e inclusiva.

Dentro de esta comunidad, las sinergias no solo se dan en los balances de impacto, sino también en las conversaciones estratégicas, en la co-creación de soluciones y en la presión colectiva para elevar los estándares. Nos inspira saber que otras compañías están transformando la forma en que se produce, se consume o se invierte. Y nos motiva aportar desde nuestra experiencia en restauración de ecosistemas y tecnología aplicada al seguimiento de compromisos ESG.

Un llamado al liderazgo con propósito

Ser sostenibles no es fácil. Requiere renuncias, valentía, inversión y coherencia. Pero también es una enorme oportunidad de liderar desde el propósito, de conectar con una generación de clientes, empleados e inversores que ya no negocian con el futuro. Que buscan marcas con las que compartir valores, no solo productos.

La sostenibilidad como motor de innovación no es una teoría: es una práctica diaria. En Retree lo vivimos en cada proyecto, en cada terreno restaurado, en cada jornada de empleo generada. Pero lo más importante no es lo que hacemos, sino lo que facilitamos: que otras empresas también puedan regenerar, medir y comunicar su impacto de forma honesta y transformadora. Porque al final, lo que está en juego no es solo la reputación de nuestras marcas. Es la posibilidad de construir un legado que tenga sentido. Para este planeta, y para quienes lo habitan hoy… y mañana.

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Nespresso y Volies pueden parecer dos empresas muy distintas, pero tienen en común la filosofía y valores B Corp de promover un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente. Se conocieron en los encuentros que B Lab desarrolla en España para promover el crecimiento de alianzas entre empresas de alto impacto social. Juntas han aprovechado la poderosa herramienta que es el voluntariado corporativo para aliarse y realizar acciones solidarias y de inclusión.

Nespresso: una gran trayectoria de compromiso ambiental y social

El firme compromiso con la sostenibilidad de Nespresso ha sido un camino de progreso y mejora constante patente a través de los años. Su programa AAA Sustainable Quality, en colaboración con Rainforest Alliance y Fairtrade, lanzado hace más de 20 años en 2003, trabaja con más de 168.000 caficultores en 18 países, promoviendo prácticas agrícolas sostenibles y mejorando las condiciones de vida de las comunidades cafetaleras. Reconcilia la idea de que el café de alta calidad puede ser fruto de una vida sostenible y próspera para los agricultores y sus comunidades, a la par que se conserva el medio ambiente.

Además, la compañía ha invertido significativamente en proyectos de reforestación y agricultura regenerativa, con el objetivo de alcanzar cero emisiones netas a partir de 2035. En el ámbito de la economía circular, Nespresso lleva más de 15 años facilitando el reciclaje de cápsulas. Actualmente, los clientes tienen a su disposición más de 7.400 puntos de recogida en todas las provincias de España. Entre las distintas iniciativas llevadas a cabo destaca el proyecto Arroz Solidario, que transforma los posos de café reciclados en compost para cultivar arroz en el Delta del Ebro, donado posteriormente a bancos de alimentos.

En 2022 se convierte en compañía B Corp, dando un paso más en este compromiso y uniéndose a un movimiento global de empresas que buscan equilibrar las ganancias con el propósito y generar un impacto positivo en el mundo, cumpliendo con altos estándares éticos, de transparencia y responsabilidad social y ambiental. Un camino de mejora continua con el objetivo de reducir la huella de carbono en su cadena de valor, alcanzar cero emisiones netas, continuar con la transición hacia una agricultura regenerativa, seguir avanzando en circularidad y mejorar la resiliencia de las comunidades caficultoras.

Volies: Más de una década promoviendo el voluntariado corporativo

Por su parte, Volies, con una trayectoria de más de una década, tiene el impacto social como eje conductor de su estrategia desde sus inicios, teniendo por objetivo acompañar a las empresas y organizaciones en promover un cambio social desde dentro de las mismas, a través de la fuerza de sus equipos como motor del cambio. Fundamentalmente a través del voluntariado corporativo como herramienta, pero también usando otras fórmulas como la gestión de la diversidad y la comunicación de impacto.

Desde Volies coordinan cada año más de 1.000 acciones de voluntariado y/o acción social para más de 70 empresas en colaboración con 400 organizaciones sociales en más de 40 países, movilizando alrededor de 43.000 personas al año y beneficiando alrededor de otras 294.000 personas de manera directa.

“El voluntariado tiene múltiples ventajas: permite el aprendizaje y desarrollo de habilidades, mejora la salud mental y física, aumenta el orgullo de pertenencia a la empresa y, sobre todo, permite vivir experiencias transformadoras y cumplir con inquietudes sociales, fomentando el sentido de comunidad”, destacan desde la empresa.

Juntas promoviendo la inclusión junto a la Fundació Finestrelles

En colaboración con Volies y la Fundació Finestrelles, voluntarios y voluntarias de Nespresso se involucraron en las actividades del taller ocupacional de la fundación, compartiendo momentos significativos y aprendiendo sobre la importancia de la integración de personas en situación de exclusión social.

La Fundació Finestrelles trabaja para mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad intelectual, promoviendo su integración social y laboral. La participación de empresas en actividades de voluntariado en la fundación no solo brinda apoyo a sus programas, sino que también sensibiliza a los empleados sobre la importancia de la inclusión y la diversidad en la sociedad.

Esta experiencia ha venido a reforzar el enfoque de Nespresso en generar un impacto positivo más allá de sus productos, extendiendo su compromiso a las comunidades donde opera, también a través de acciones de voluntariado corporativo, involucrando a sus equipos de manera directa en ese compromiso.

“Para Nespresso cada acción cuenta en la creación de un mundo más justo y sostenible. Juntos cooperamos en proyectos que promueven la integración de personas en situación de exclusión social, ayudando a crear un entorno más solidario. Nos sentimos muy orgullosos de nuestra cultura ICAN, que nos impulsa a realizar estas bonitas iniciativas y a reforzar nuestro propósito. ¡Juntos, y en alianza con otras organizaciones como Volies y Finestrelles, podemos seguir marcando la diferencia!”, resaltan desde la organización. Una alianza entre empresas B Corp que seguirá dando sus frutos de impacto social en el futuro.

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En un mundo que demanda soluciones urgentes para enfrentar la crisis climática y social, Tebrio se posiciona como un referente de innovación responsable dentro del sector biotecnológico. Nuestra visión trasciende la mera producción: buscamos transformar la industria a través de un compromiso profundo con la sostenibilidad y el bienestar colectivo. En este camino, formar parte de la comunidad B Corp ha sido una decisión clave que refuerza nuestro propósito y nos conecta con un movimiento global que comparte la misma ambición.

Ser B Corp: una declaración de intenciones

La certificación B Corp no solo representa un reconocimiento, sino que es el resultado de años de trabajo orientados a minimizar el impacto ambiental, optimizar recursos y generar valor compartido. Nuestra planta en Salamanca, alimentada al 100% por energía renovable y diseñada bajo un modelo de residuo cero, es un ejemplo tangible de cómo la innovación puede y debe estar al servicio de la sostenibilidad.

Pero ser B Corp va más allá de la excelencia operativa o la eficiencia energética. Supone integrar la sostenibilidad en su sentido más amplio: desde el bienestar de los empleados y la contribución al desarrollo local, hasta la transparencia en la gestión y la creación de productos que aportan soluciones reales a los grandes retos globales, como la seguridad alimentaria o la reducción de emisiones.

Sinergias que multiplican el impacto

Pertenecer a la comunidad B Corp nos conecta con empresas de diferentes sectores, pero con un propósito común: redefinir el éxito empresarial. Esta red facilita el intercambio de conocimiento, la colaboración en proyectos conjuntos y la generación de sinergias que, de manera individual, serían difíciles de alcanzar.

Gracias a este ecosistema, en Tebrio hemos podido acelerar la adopción de buenas prácticas, identificar oportunidades de innovación y escalar soluciones sostenibles que trascienden nuestro sector. El diálogo abierto con otras B Corps nos permite aprender de sus experiencias, compartir desafíos y, sobre todo, sumar fuerzas para incidir en políticas públicas y tendencias de mercado que favorecen la transición hacia una economía más verde y responsable.

La colaboración entre B Corps no solo se traduce en alianzas comerciales, sino también en iniciativas compartidas de impacto social y ambiental. El compromiso colectivo por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la medición rigurosa de nuestra huella ambiental refuerzan la credibilidad de todo el movimiento y nos animan a seguir avanzando en la mejora continua.

Innovación con propósito: el caso Tebrio

La innovación en Tebrio está orientada a transformar subproductos de bajo valor en materias primas premium, utilizando el Tenebrio molitor como base para soluciones en alimentación animal, agricultura, bioplásticos, cosmética y otros sectores estratégicos.

Nuestro modelo de economía circular y residuo cero permite reducir en un 90% el consumo de agua y tierra respecto a la producción tradicional de proteína, además de eliminar emisiones de metano y amoniaco.

Este enfoque disruptivo no solo responde a la necesidad de alimentar a una población creciente con menos recursos, sino que también demuestra que es posible generar desarrollo económico local y empleo de calidad sin comprometer el futuro del planeta.

La reciente puesta en marcha de la mayor planta de insectos del mundo en Salamanca es una muestra de cómo la biotecnología puede liderar la transición hacia una industria más eficiente, resiliente y respetuosa con el entorno.

Ser empresa con propósito: una apuesta de futuro

En Tebrio, entendemos que ser una empresa con propósito implica asumir la responsabilidad de liderar con el ejemplo. La sostenibilidad, en su sentido más amplio, es la brújula que guía nuestro crecimiento y nos obliga a repensar constantemente cómo podemos maximizar nuestro impacto positivo.

Formar parte de B Corp nos da la oportunidad de amplificar este impacto, sumando esfuerzos con una comunidad global que comparte la convicción de que los negocios pueden y deben ser una fuerza para el bien común. En un mundo que exige respuestas urgentes a los desafíos ambientales y sociales, la unión de empresas con propósito es, sin duda, el camino más sólido hacia un futuro más sostenible, innovador y humano.

Este artículo forma parte del Dosier Corresponsables: B Corp – Empresas con Propósito

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Vivimos un momento histórico en el que sostenibilidad e innovación se presentan no solo como conceptos complementarios, sino como fuerzas inseparables para rediseñar el futuro. Innovar es, hoy, un acto de responsabilidad colectiva.

En un mundo atravesado por la incertidumbre, la polarización y una crisis de confianza estructural, necesitamos nuevas respuestas. Las fórmulas del pasado ya no bastan para afrontar retos como el cambio climático, la desigualdad social o el agotamiento de recursos. Y es ahí donde sostenibilidad e innovación convergen: como ejes transformadores del sistema y no como meras tendencias.

Innovar es atreverse a imaginar lo distinto

Hoy, innovar no es solo desarrollar nuevas tecnologías. Es repensar nuestras formas de producir, liderar y relacionarnos desde una mirada más humana, inclusiva y regenerativa. Implica escuchar, colaborar y co-crear soluciones que respondan a las necesidades del mercado, a las expectativas sociales y a los límites del planeta.

En CANVAS, lo vivimos desde la práctica diaria. Nuestro laboratorio de innovación CANVAS LAB no busca innovar por innovar: su función es usar la innovación como herramienta para mejorar procesos, enriquecer servicios, generar conocimiento y, sobre todo, abrir espacios de diálogo colectivo. A través de un formato de co-creación interna, actualizamos nuestras metodologías y elaboramos nuevos proyectos, para compartir nuestro conocimiento e impulsar ideas sostenibles en las organizaciones. Porque innovar también es saber escuchar, contrastar ideas y aprender desde la inteligencia compartida.

En esta línea, hemos creado también el Panel de Expertos en Doble Materialidad CANVAS: un grupo de personas expertas que aportan su visión y conocimiento en los estudios de doble materialidad que realizamos para nuestros clientes. Nuestro objetivo es construir una red de profesionales en sostenibilidad, donde podamos compartir conocimiento y aplicarlo en proyectos reales. Una de las características más relevantes de este grupo es su diversidad de perfiles, con experiencia en asuntos públicos, gestión del talento, reputación, impacto ambiental, social e inteligencia artificial, entre otros. En un contexto marcado por nuevas normativas y requerimientos técnicos, se trata de una iniciativa pionera que reconoce la importancia de la escucha activa y del know-how multidisciplinar.

Un nuevo liderazgo para una nueva era

Este enfoque requiere liderazgos distintos. Líderes capaces de asumir riesgos, dar voz a sus equipos y catalizar el cambio desde dentro. Así lo refleja el III Estudio de Propósito y Liderazgo Transformador, que revela que tres de cada cuatro personas consideran necesaria una transformación profunda del sistema actual.
Según los datos, el 67 % de la ciudadanía cree que el liderazgo empresarial puede contribuir activamente a regenerar el sistema, haciéndolo más justo y sostenible. Pero para lograrlo, las empresas deben transformar sus formas de tomar decisiones, revisar cómo miden el éxito y redefinir su papel en la sociedad.

De la responsabilidad a la acción

Los grandes retos actuales —desde la salud mental hasta la lucha contra la corrupción— no pueden resolverse desde la lógica de siempre. Requieren enfoques nuevos, colaborativos, valientes. Requieren innovación.
Y no cualquier innovación: una que abrace la complejidad, que conecte eficiencia con justicia, tecnología con empatía, impacto con propósito.

Las redes empresariales comprometidas con esta visión, como la comunidad B Corp, de la que CANVAS forma parte, demuestran que es posible. Empresas que aprenden, experimentan y comparten formas de hacer empresa con propósito, midiendo su éxito no solo en beneficios económicos, sino también en impacto social y ambiental.

Una de las formas en que CANVAS ha decidido impactar positivamente en la sociedad es a través de RADAR CANVAS: nuestra plataforma de análisis de tendencias e investigación. Los artículos, informes trimestrales y estudios anuales que generamos están disponibles gratuitamente en nuestra web, reflejando nuestro compromiso con el desarrollo de conocimiento abierto para impulsar el liderazgo social y la integración de la sostenibilidad en las organizaciones.

Hacia futuros comunes

La innovación que necesitamos es la que transforma. La que se atreve a cuestionar lo establecido y a diseñar nuevas formas de habitar el mundo. Porque solo así podremos imaginar —y construir— futuros en los que todos podamos vivir, sin dejar a nadie atrás.

Esta entrevista forma parte del Dosier Corresponsables: B Corp – Empresas con Propósito

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En un panorama empresarial que exige cada vez más responsabilidad e impacto positivo, el branding y el diseño gráfico se presentan como herramientas estratégicas para activar compromisos, impulsar cambios reales y hacer tangible un propósito.

Desde NOMON DESIGN, agencia de branding, diseño gráfico y packaging con sede en Barcelona, nos sumamos a la comunidad B Corp a principios de 2023, formalizando nuestro compromiso con la sostenibilidad y el impacto social que ya formaba parte de nuestro ADN.

Porque nuestro mayor impacto como agencia radica en el impacto que generan nuestros clientes y colaboradores, creemos firmemente que la creatividad y el diseño gráfico pueden —y deben— estar al servicio del impacto positivo como herramientas de transformación.

Además, formar parte del movimiento B Corp responde a una convicción ética y a una visión de futuro que pasa, inevitablemente, por la colaboración. La colaboración entre B Corps genera sinergias únicas: permite a organizaciones con propósitos alineados aunar esfuerzos, conocimiento e innovación para abordar desafíos y amplificar su impacto positivo.

Un claro ejemplo de esta sinergia se materializa en nuestra relación con LC Paper, una empresa con más de 140 años de trayectoria y pionera en la fabricación de papel tisú sin emisiones de CO2. Colaborar con una compañía con una visión tan potente y alineada con nuestros valores es un privilegio y una oportunidad para impulsar un cambio real a través del branding y el diseño gráfico del packaging.

Desde que iniciamos nuestra colaboración en 2019, hemos abarcado diversas áreas, demostrando cómo el branding y el diseño gráfico pueden ser palancas clave para poner en valor su compromiso con la sostenibilidad y diferenciarlos en un sector tradicionalmente B2B.

Hemos conceptualizado su dirección de arte y redefinido sus materiales corporativos, como su catálogo, con el objetivo de alejar a la marca de la imagen convencional de su sector y acercarla al público final, reforzando el concepto de sostenibilidad y atributos asociados al territorio del hogar.

Sin embargo, uno de los proyectos que mejor refleja nuestro propósito compartido es el nuevo packaging que conceptualizamos y diseñamos para su gama de papel higiénico ecológico Dalia®. El reto fue crear un packaging que reflejara el ADN sostenible de la marca, rompiendo con el tradicional envoltorio de plástico tan característico en esta categoría de gran consumo.

La solución que desarrollamos, única en el mercado mundial y patentada por LC Paper, fue el concepto de «packaging transparente de cartón». Este innovador enfoque sustituye el plástico por cartón impreso, manteniendo la visibilidad del producto. Es una alternativa de cartón reciclable que no solo es resistente y facilita la identificación en el lineal del supermercado, sino que también permite optimizar el transporte al crear palés más compactos, reduciendo así su impacto en emisiones. Este packaging es sostenible, libre de plástico, de emisiones y sin blanqueantes.

Este packaging va más allá de un simple contenedor; es una declaración de principios. Una muestra visible del liderazgo de LC Paper en sostenibilidad, que traduce su filosofía de empresa en un soporte tangible, eficaz y con personalidad propia.

Aplicamos también en el packaging su nueva dirección de arte que refuerza la sostenibilidad y la conexión con el hogar. Incluso rediseñamos la identidad de la marca Dalia® para que fuera más tangible y cercana, mejorando su visibilidad en el punto de venta.

Esta colaboración demuestra el valor de trabajar mano a mano entre B Corps. No se trata de ofrecer un servicio, sino de cocrear soluciones que estén profundamente alineadas con el propósito y los valores compartidos. 

Y este modelo de colaboración lo estamos replicando con otras empresas B Corp como es im-perfect®, una marca de conservas vegetales comprometida con la sostenibilidad ambiental y la justicia social. Esta iniciativa de la Fundació Espigoladors es pionera en el aprovechamiento de fruta y verdura imperfecta para la elaboración de productos de alimentación sostenibles. Para es im-perfect®, también hemos trabajado el rediseño de su identidad visual, comunicación digital y desarrollo de su sistema de packaging, reforzando su posicionamiento y aportando coherencia, emoción y visibilidad a un proyecto profundamente transformador.

La sinergia entre visiones pioneras como las de LC Paper o es im-perfect® y nuestra experiencia ha permitido transformar su branding, packaging y comunicación en unas marcas auténticas y relevantes. Un paso adelante hacia el impulso de la economía circular y la consolidación de una nueva forma de diseñar con impacto.

Fortalecer estas sinergias es clave para acelerar la transición hacia una economía más justa, equitativa y sostenible. Y demostrar que es posible (y necesario) ser una empresa que busca ser la mejor para el mundo, no solo la mejor del mundo.

Porque al final, ser parte del movimiento B Corp no va de lo que decimos, sino de lo que hacemos. Y lo que hacemos —cómo lo hacemos, con quién lo hacemos y para qué lo hacemos— define el tipo de impacto que dejamos en el mundo.

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En INCAPTO creemos firmemente que la sostenibilidad no es una tendencia ni una estrategia de marketing: es el eje que define quién somos, cómo trabajamos y por qué existimos. Nacimos con una misión clara: acabar con las cápsulas y el café torrefacto y demostrar al mundo que existe una mejor manera de tomar café, ya que tenemos la certeza de que disfrutar de un café de calidad, más sostenible y más responsable con las personas que lo cultivan es posible.

Hemos creado una solución de café en grano de especialidad y cafeteras superautomáticas que nace como respuesta a un modelo de consumo insostenible. Las cápsulas de un solo uso se han convertido en la norma y esto, además de acercar un café de poca calidad al consumidor, genera millones de residuos diarios y contribuye a un mundo del café poco justo para las personas que lo cultivan en origen. Con nuestra apuesta de café en grano y cafeteras, que rompe con esta lógica desde la raíz, ofrecemos comodidad y calidad, sin generar residuos innecesarios, además de plena trazabilidad sobre los orígenes de nuestras variedades.

Este mismo enfoque se traduce también en nuestro modelo B2B, basado en la servitización de las máquinas bajo un formato de Coffee as a Service. No vendemos nuestras cafeteras, las cedemos y mantenemos bajo nuestra responsabilidad para asegurar su correcto funcionamiento, alargar su vida útil y garantizar una experiencia coherente con nuestros valores. Gracias a un software propio y a la tecnología IoT integrada, nuestras cafeteras están conectadas. Esta conectividad no solo nos permite anticipar incidencias y controlar el stock y el consumo en tiempo real, sino también la posibilidad de ofrecer a nuestros clientes informes mensuales sobre su impacto ambiental, con datos como las emisiones evitadas, los residuos no generados o los kilos de café consumidos. Convertimos la sostenibilidad en algo tangible y medible, y la compartimos con total transparencia con nuestros clientes.

Medir el impacto no es solo una forma de rendir cuentas, es una herramienta clave para tomar mejores decisiones. Por eso, hemos desarrollado una herramienta interna que nos permite calcular con precisión el impacto ambiental de cada lanzamiento y, por ende, orientar la selección de los productos que conforman nuestro portafolio. A la hora de añadir nuevos productos, solo incorporamos aquellos que están alineados con nuestros criterios de sostenibilidad y descartamos cualquier opción que no esté a la altura del estándar que nos exigimos como marca. Esta capacidad de análisis refuerza nuestra coherencia y nuestro compromiso con el impacto positivo.

Para nosotros, innovar no significa simplemente optimizar procesos, sino regenerar. Hemos impulsado suscripciones trimestrales para minimizar el impacto logístico, desarrollado sistemas de refill como INCAPTO Re-Box para clientes B2B y creado proyectos de economía circular. Cada acción responde a la misma lógica: cuestionar lo establecido, evitar soluciones superficiales y construir un modelo más consciente, tanto para nuestros clientes como para los caficultores y el planeta.

Este compromiso se refleja también en nuestra cultura interna. Creemos que el propósito se vive desde dentro y que la coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos empieza con nuestro propio equipo. Ser parte del movimiento B Corp nos ha proporcionado un marco exigente que nos impulsa a mejorar constantemente. Más que un sello, es un compromiso con la mejora continua en lo ambiental, social, laboral y ético.

Estamos convencidos de que innovar con propósito no solo es posible, sino imprescindible. La sostenibilidad no frena la innovación, la impulsa, ya que nos permite construir relaciones más sólidas, productos más relevantes y un impacto que va mucho más allá de lo económico.

Nuestro objetivo es liderar una transformación profunda en la forma de consumir café y demostrar que es posible escalar un modelo de negocio responsable sin renunciar a los valores con los que nació. En INCAPTO no solo aspiramos a ser una alternativa más sostenible. Aspiramos a demostrar que las empresas pueden cambiar el mundo. Taza a taza, decisión a decisión.

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